Aura Medina de Wit
Psicoterapeuta
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Los triángulos familiares, no terminan cuando crecemos. Continúan afectando nuestras vidas y se muestran en nuestras relaciones.
Si no somos capaces de reconocerlos y resolverlos, entraran sin darnos cuenta en nuestras relaciones de pareja.
Las “niñas de papá” suelen ser mujeres a las que en la infancia les fue más fácil relacionarse con el papá.
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Complejo de Elektra
- Término propuesto por Carl Gustav Jung en 1912 para designar la contrapartida femenina del complejo de Edipo
- Es un concepto psicológico que procura explicar la maduración de la mujer.
- Consiste en una atracción afectiva de la niña en la figura del padre.
Cuando la fijación hacia el papá ya no es normal
- Es normal en niñas de 3 a 5 años, pero puede haber problemas cuando va más allá de lo sano
- Puede generar rivalidad con la madre
- Dificultad para vincularse con otras mujeres
- Dificultad para tomar decisiones al elegir pareja
- A veces causa cuadros de histeria o neurosis (angustia y ansiedad)
- Constante búsqueda de atención
- Buscan inconscientemente al padre fantaseado
- En casos extremos, causa frigidez o anaorgasmia
Si son madres invierten el círculo: son rivales de sus hijas, quienes “les quitan el afecto de su pareja”; o son posesivas con los hijos.
Cómo son las “niñas de papá”
- Siempre niñas o siempre amantes
- Siempre necesitan protección y son incapaces de dar
- Los hombres sólo les sirven entre las sábanas o como “empleados”
- Arrogantes
- Critican a todos los hombres que les rodean
- Nadie está a la altura de “papi”
- Generalmente arman pareja con “hijos de mami”: galanes seductores, pero eternos adolescentes, siempre lejos de ocupar su “rol” como hombres.
- Fuertes, autoritarias
- Líderes laborales, pero con incapacidad de ejercer virtudes “blandas”, como dejarse cuidar, conectarse con otros inocentemente, disfrutar las pequeñas cosas.
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Hombres: ¿Estás con una niña de papá?
- Te presenta a su papá. ¡Rápidamente!
- Ella requiere de la aprobación de su padre en cualquier decisión que tome contigo. Casarse, vivir juntos, viajar…
- Cuando necesita consejo o reparar algo, no te llama a ti: llama a su papá.
- Ella es de “alto mantenimiento”
- Constantemente te compara con él.
Si eres niña de papá, ¿Qué puedes hacer?
- Tomar conciencia
- Trabajar la aceptación
- Tomar responsabilidad
- No somos responsables de lo que nuestros padres nos dieron, pero sí de lo que hacemos con eso y cómo nos rediseñamos.
Moverse de lugar
- Renunciar a ser «la hija de papi» requiere mucha fuerza y conciencia.
- Pregúntate: ¿por qué no veo con respeto a mi madre?, ¿miro con humildad lo recibido? Todo lo bueno que creo que tengo, ¿de dónde vino, entonces?, ¿qué me impide honrar a mis padres?
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