Ana Paula Santamarina
Maestra en Terapia Racional Emotiva Conductual
Consulta a nuestra especialista
- Relájate efectivamente
- Utiliza la pasión como tú gasolina
- Diviértete, ten buen humor
- Enfócate inteligentemente
- El manejo gozoso y eficiente de la agenda
- Actúa con determinación haz las cosas
1. Relájate efectivamente
- Es gravísimo que la gente crea que no hay eficiencia en la relajación, que relacionen el término relajarse con “alentarse”, “pasmarse”, “dormirse”.
- Para que la relajación sea parte de tu vida cotidiana, es muy importante que vaya de la mano con la capacidad de permanecer atento a lo que sucede alrededor y en tu interior, de otro modo lo relacionarías con el sueño y eso no te permitiría ser eficiente y productivo.
Eckhart Tolle en su libro “El poder del ahora” da un ejemplo resulta totalmente adecuado para describir la “Relajación efectiva”, dice que sus mejores maestros zen han sido los gatos, ¿has observado a un gato cuando está sentado con los ojos abiertos?, date cuenta como está presente y al mismo tiempo totalmente relajado, no muestra tensión alguna, sin embargo si pasa un pájaro cerca, lo capta con tal rapidez que en un segundo brinca o corre para atraparlo.
- Donde hay tensión, el cuerpo sufre y baja la vibración y por lo tanto es más difícil ser saludable, feliz y a la larga productivo.
La relajación efectiva es una actitud porque implica una predisposición e intención. Es al mismo tiempo una actividad que se debe de practicar hasta convertirse en una manera de “ser” o “estar”. Se practica:
Esto te interesa: ¿Por qué no me funciona la ley de atracción?
- Soltando todos los músculos y articulaciones de tu cuerpo.
- Respirando más profunda y pausadamente.
- Y serenando la mente.
A medida que vas:
- Ampliando el foco de tu atención. Implica literalmente ampliar el perímetro de tu capacidad de percibir.
- Profundizando en la atención o percepción de los que sientes y vives en tu interior.
2. Utiliza la pasión como tú gasolina
- La pasión es un “driver” es un motor que te impulsa, que te mueve a hacer las cosas. Por ejemplo, en un maratón no necesariamente gana el que tenga el mejor entrenamiento, la mejor condición física o la mejor técnica.
- La pasión nadie te la puede dictar o imponer, sólo se siete en el corazón, en todo tu ser.
- Las personas apasionadas no toman atajos consideran que el proceso de aprendizaje es parte importante para alcanzar sus metas.
Reflexión de Nelson Mandela “There is no passion to be found playing small, in settling for a life that is less than the one you are capable of living.”
3. Diviértete, ten buen humor.
- La tensión baja la vibración generando en consecuencia emociones negativas.
- La risa libera la tensión. Cuando tengas un proyecto nuevo, emociónate como niño que va a jugar… aviéntate un “chascarrín” cuando las cosas se pongan más difíciles.
- Divertirse al igual que la relajación efectiva no sólo son actividades, son actitudes, es decir tú necesitas entrar al nuevo proyecto en “mood” diversión y creatividad, se requiere de tu predisposición.
4. Enfócate inteligentemente
Escucha el podcast: Cambia tus emociones : cambia tus resultados
- Cuando pones atención en algo puedes involucrar emoción o no. Es esencial decidir en donde quieres involucrar tu emoción y en donde no, porque una vez que la involucras en un proceso de atención, te sintonizas con lo el objeto de tu atención.
- Donde pones tu atención con emoción, pones tu vibración.
5. El manejo eficiente y gozoso de la agenda
- Atrae tu día.
- Elimina los “tengo que».
- Tu agenda debe de reflejar tus prioridades.
- Se flexible más no autoindulgente.
«Nunca cambiarás tu vida hasta que no cambies algo que haces todos los días» John C. Maxwell
Escucha el podcast: Ten una vida productiva
«La verdadera disciplina no se impone. Solo puede venir del interior de nosotros mismos» Dalai Lama
6. Actúa con determinación haz las cosas
Ejercicio para desbloquear la energía de la voluntad:
1. Nos hincamos y tomamos nuestros tobillos con las manos.
2. Echamos la pelvis hacia adelante con la cabeza viendo al frente.
3. Hacemos respiración de fuego.
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