Por Aura Medina de Wit
Tw. @auramedinaw
Todos queremos ser felices. Queremos estar bien, tener paz, salud, buenas relaciones, triunfar, pero lo que a casi nadie nos enseñan es que estas cosas no son algo que “simplemente suceden”. No es que un día despertemos y por arte de magia nuestra vida esté llena de cosas lindas.
Por más que en año nuevo usemos calzones rojos y amarillos, o barramos la entrada de nuestra casa, nos atragantemos las 12 uvas y escribamos una lista de propósitos (que casi siempre perdemos entre la basura de la cena), la vida no se arregla solita.
El truco esta en crear buenos hábitos. Hábitos que trabajen para ti, para que seas más feliz, más sano o más productivo.
Piezas de cambio
Complícate lo que quieres eliminar, hazte fácil lo que quieres lograr
Es decir, si sabes que tienes una maldita debilidad por los chocorroles, no tengas una mega caja en tu casa.
Júntate con personas que tienen hábitos que tú quieres tener
Eso seguro te lo decía tu abuelita con el clásico: “Ay, esos amigotes tuyos no me gustan nada”. Los hábitos se pegan, por eso en un grupo de chelas y dominó no vas a agarrar el hábito de nadar en las mañanas.
Siempre bien descansadito
El habito básico por excelencia es dormir suficiente, si no está muy canijo tratar de lograr otros hábitos nuevos si traes la pila hasta abajo.
Aguas con los premios
Si eres de los que necesitan recompensas por su esfuerzo, que sean para fortalecer tu hábito.
¿Salto al agua o poco a poco?
Los pasitos chiquitos pueden ser muy útiles, especialmente cuando estamos tratando de hacer algo que parece muy agobiante.
Mañana no va estar mejor
El mejor momento para empezar cualquier cosa es justo ahora. Te propones algo, y después de tres años te das cuenta que ese momento nunca llegó.
¿Fuera de golpes o a pasitos?
Hay personas que pueden dejar de fumar de la noche a la mañana, porque con ellos es todo o nada. Pero esta estrategia no funciona para los moderados, esas personas que pueden tener un chocolate guardado en el escritorio y comer un pedacito cada día, ellos necesitan ir poco a poco.
¿Quieres que alguien tenga un buen hábito? Pégaselo
Tus hijos no van a ser unos devoradores de verduras si tú te la pasas comiendo tacos de buche con cuero.
Aura Medina de Wit es psicoterapeuta en codependencia y relaciones. Síguela en Twitter como @auramedinaw
Si te gustó esta nota, también te va a gustar Hábitos que hace la gente influyente