Eduardo Calixto
Médico cirujano con Maestría y Doctorado por la UNAM
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1. Las primeras etapas del enamoramiento asemeja una adicción.
• El amor romántico en su etapa temprana se caracteriza por la adicción, que desaparece gradualmente mientras la relación avanza.
• Por lo tanto, la comparación de la concordancia y discordancia entre el amor romántico y la drogadicción puede aclarar los tratamientos potenciales para la adicción.
Se compara el amor romántico y la adicción a las drogas a partir de tres aspectos relevantes:
• Características de comportamiento
• Funcionamiento del cerebro
• Factores neuroendocrinos
• El amor romántico mejora la función especial en la red de cognición, mientras que la adicción a las drogas muestra disfunción especial en la red de control cognitivo
Escucha el podcast: La antitesis del amor
OJO: Aunque hay similitudes importantes entre el inicio del enamoramiento y el uso de drogas, también hay diferencias importantes:
Ya sabemos que la primera fase del amor romántico tiene una duración de 6 meses, se caracteriza por estrés, pensamiento obsesivo, dependencia emocional, deseo, PERO con el tiempo desaparecen y se transforman en sentimientos de calma, seguridad y equilibrio.
SIN EMBARGO, las personas con adicción a las drogas, inician con un comportamiento impulsivo, y finalmente se convierte en el uso compulsivo de drogas. Con el abuso continuo de estas sustancias, el gusto, el estrés, el pensamiento obsesivo, se vuelven cada vez más graves.
La comprensión de estas diferencias puede contribuir al descubrimiento de tratamientos para la prevención y curación de la adicción.
2. El amor se inicia en las partes más primitivas del cerebro.
• Genera emociones que incrementan memorias y aprendizaje: como no lo hace otro proceso. Depende de 10 sustancias químicas y 21 áreas anatómicas. Enseña y regula la motivación.
3. Lujuria, apego y atracción NO son lo mismo para el cerebro.
• El amor romántico podría considerarse como una colección de actividades asociadas con la adquisición y retención de emociones necesarias para sobrevivir y reproducirse.
• Estas emociones cambian las estrategias de comportamiento del individuo de una manera que aumentará la probabilidad de alcanzar estas metas.
La lujuria, el apego y la atracción son procesos distintos pero entrelazados en el cerebro, mediados por SUS PROPIOS neurotransmisores y circuitos.
• Estos circuitos se alimentan y se refuerzan mutuamente.
• El deseo sexual está mediado por la testosterona y los estrógenos y tiene la amígdala como un centro importante.
• La atracción es mediada por hormonas de estrés
4. El amor protege genes: cuida la herencia.
• Frente a una amenaza para su hijo, el sistema de cuidado se activa.
• El cerebro valora lo nuestro, se activa al ver el sufrimiento de nuestros hijos.
• Ver caras familiares procesan más apego.
• Cuidar a nuestro hijo se hace por análisis de la cara, más que por evaluación de los detonantes posibles de dolor.
Entre más amor, más se activan estas áreas y se responde mejor ante los riesgos.
5. Los celos SÍ importan en el amor.
• Aunque no lo creas, ¡los celos pueden ser un estabilizador de las relaciones románticas!
• NO ABUSES. Los celos adecuadamente bien llevados pueden mejorar la relación.
• Los celos apropiados, indican la intención de proteger la relación, y son esenciales para experimentar el amor y el mantenimiento de la estabilidad de la relación romántica
• SIN EMBARGO, cuando los celos llegan al extremo, hay graves consecuencias, como la violencia doméstica, suicidios, asesinatos.
Escucha el podcast: Celoso, territorial o posesivo
Una encuesta en AOL sólo entre 5 mil mujeres refleja
55% dice no tener problemas de confianza con su pareja
13% dijo que su marido se pone celoso sólo con verla hablar con otro hombre
44% piensa que los celos hacen un hueco grande en la felicidad marital
77% dijeron sentirse celosas si sus maridos tenían una amiga muy cercana
53% aceptaron revisar de manera secreta los mensajes y llamadas del celular de su marido
53% coquetea para provocar los celos de su hombre
6. Los populares y atractivos llaman la atención, nos hacen competitivos y nos quita el dolor.
• Las personas tienen un mayor deseo de salir con socios altamente atractivos, lo que induce la competencia intrasexual entre personas del mismo sexo.
• La competencia intrasexual modula la sensación de dolor para un rival del mismo sexo.
• Un estudio, arrojó que los participantes reportaron menor intensidad de dolor si se sienten afortunados al ser escogidos por una potencial pareja.
• Neuralmente, se encontraron activaciones relacionadas con el dolor reducidas en la ínsula anterior y la corteza anterior media cingulada y activaciones aumentadas en el giro frontal superior derecho (SFG) y el giro prefrontal mediano (MPFC) para el sujeto con suerte comparado con el compañero normal.
Escucha el podcast: Te amo, pero te odio
7. Los receptores de dopamina que modulan el amor: D2 y D3 (inhibidores de la lógica y la congruencia).
• Contenidas en la corteza orbitofrontal medial y la corteza prefrontal medial, la primera de las cuales ha estado fuertemente implicada en una variedad de experiencias gratificantes, incluyendo la de la belleza y el amor.
• Una correlación positiva se obtuvo entre los niveles de excitación y la activación dopaminérgica sólo en el enamoramiento.
8. El amor nos ayuda a la salud del cerebro: permite neurogénesis.
• Se ha identificado una asociación positiva entre la intensidad de los sentimientos románticos tempranos y los niveles séricos de factor de crecimiento nervioso (NGF).
• Estos hallazgos vinculan el amor con las vías biológicamente relevantes para la supervivencia de las neuronas e iluminan los correlatos bioquímicos de un sentimiento tan complejo que afecta tan profundamente nuestras propias vidas.
• Los avances en la neurobiología del amor sugieren que la naturaleza misma de la vinculación romántica humana tiene la función de aprender y otorgar salud al cerebro.
9. La química de la monogamia: el amor es más que besos.
• La oxitocina, la serotonina, el cortisol, el factor de crecimiento nervioso y la actividad prefrontal son las responsables de ser monógamos.
10. El odio a tu ex: es anatómico.
• La visualización de una cara odiada activa al giro frontal mediano, putamen derecho, bilateralmente en la corteza premotora, e ínsula medial.
• El odio por lo tanto lleva: interpretación, atención, proyección y dolor.
• Se inhibe la corteza frontal izquierda: eliminamos la lógica.
