Mario Guerra
Tanatólogo, conferencista, business coach, psicoterapeuta
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• Esta época es una de buena voluntad y buenos deseos. O al menos así se supone que debería ser, pero para muchos es época de balances y de pensar y repensar acerca de nuestras relaciones.
• Nadie quiere pasar un año más guardando silencio acerca de nuestras emociones o reclamos, pero también se teme la reacción o daño que se pueda causar al otro si se abren temas delicados. ¿Qué es mejor; decir lo que se siente de una vez o mejor callar para “llevar la fiesta en paz”? ¿Se pueden ambas cosas? ¿Cómo hacerlo? Vamos a plantearnos posibles respuestas a estas interrogantes.
¿Cómo es eso de decir lo que siento o llevar la fiesta en paz?
• Muchas personas tienen roces, dificultades o resentimientos con otros que por un lado necesitan ventilar o resolver, pero prefieren callar, a veces por mucho tiempo, por el temor a que decir que lo que sienten lo empeore todo.
• No reflexionan incluso hablando lleva tiempo y esfuerzo resolver un conflicto o aclarar una situación, guardar silencio lo puede complicar todo porque es como pensar que todo se arreglará “por caducidad”, olvido o por arte de magia.
¿Crees que decir lo que sientes es empeorar las cosas?
Eso va a depender de muchos factores:
Lo que sientes
• Si sientes odio y se lo dices al otro, probablemente eso genere gran fricción en la relación.
• A menos que ya quieras romperla definitivamente y que tu intención sea lastimar al otro como una forma de “compensar”
• La pregunta es: ¿De verdad sientes lo que dices que sientes o lo dices porque estás muy lastimado?
• Muchas veces la tristeza y el dolor se manifiestan a través del enojo porque eso nos hace sentir menos vulnerables.
¿Qué huella dejarán cuando se hayan ido? Escuchen
La manera en que dices lo que sientes
• Si lo haces agresivamente, acusando, calumniando, generalizando, distorsionando, omitiendo, insultando o con emociones desbordadas, habrá problemas.
• Cuando expones un argumento de manera emocional más que racional, quien lo escucha reacciona más a tus emociones que al mensaje en sí mismo.
• Si lo haces de manera acusatoria o agresiva, el otro tenderá a defenderse.
• ¿Quieres que el otro comprenda tu perspectiva o quieres que se cierre en la suya?
• Es prácticamente imposible validar un punto de vista ajeno cuando nos sentimos amenazados por el otro.
• Pero a muchos, exponer con agresión un argumento los hace sentir por un momento en control de la situación mediante una supuesta superioridad moral “Tú me lastimaste; tú eres malo; yo soy tu víctima”
• ¿Eres de los que piensa que hay ciertas cosas que deben o sólo pueden ser dichas de manera agresiva?
• ¿Dónde aprendiste eso?
• Quizá en la infancia con lo que viste
• Es quizá una forma de justificar el desborde emocional que no puedes controlar amparándote en la supuesta lógica del “¿Pues cómo quieres que se lo diga, cantando?”
• ¿Quieres alguien que te escuche, te comprenda y te valide o quieres crear un adversario?
Aquí la importancia de ser agradecidos y saber pedir perdón
Lo que esperas que suceda
• “El lenguaje no es inocente”, decía el psicoterapeuta noruego Tom Andersen; todo lo que se dice no se dice “porque sí”, sino que consciente o inconscientemente se está esperando una reacción por parte del otro. Se está esperando que algo suceda con lo que decimos.
• Si estás esperando que el otro reconozca con humildad su error y no lo hace, te vas a sentir frustrado o ultrajado
• Que el otro reconozca, que repare, que pida perdón, que se humille
• No siempre el otro ve y siente de la misma manera que tú lo que ha pasado
• Puedes esperar empatía, pero no sumisión o que reconozca lo que no reconoce o recuerda haber hecho
• El otro no es un ser pasivo que sólo escuche. También debes asumir que habrá una respuesta a lo que tú dices y muy ligada a la forma o el momento en que lo has dicho.
El momento en que dices lo que quieres decir
• No hay momentos perfectos, solo momentos más adecuados
• Todas las semanas tienen 7 días, no quieras arreglarlo todo ahora mismo sólo porque tú estás listo; ¿el otro lo está?
• No lo hagas antes de ir a dormir en un día de trabajo
• No lo hagas con alcohol encima
• No lo hagas el 24 o el 31 de diciembre
• No lo hagas con prisa de ninguno de los dos, antes de un viaje largo o en su lecho de muerte
• No lo hagas cuando sientas que ya no aguantas más
• Hacerlo así te hará explotar. En todo caso aléjate y sigue las recomendaciones que daremos al final
Lo que te mueve a decir lo que sientes
• ¿Qué deseas en realidad?
• Comprensión, venganza, llamar su atención, cobrar una vieja deuda, lastimar, humillar, reparar
• ¿Quieres un resultado inmediato o es el incio de una serie de conversaciones que a larga beneficien a ambos y a su relación?
Las razones por las que crees que pasó lo que pasó
• ¿Sabe el otro lo que ha pasado? Tú asumes que sí o que incluso actuó deliberadamente o hasta con malicia
• Si piensas que tras lo que sientes que te hicieron hay desamor, odio, maldad o desprecio, vas a empeorar no sólo tu sentir, sino la misma forma de reclamar y la relación con el otro.
¿Qué pasa si prefiero llevar la fiesta en paz y mejor no decir nada?
• ¿De verdad la llevarías en paz guardando silencio? ¿Por cuánto tiempo más?
• Al callar vas acumulando resentimiento.
• Cuando sientes que alguien te ha lastimado, eres más susceptible de poner atención a otras cosas que el otro hace que te puedan lastimar.
• También pre-interpretas sus intenciones y todo lo malignizas, empeorando la relación.
• Dejas que pase el tiempo y es más complicado hablar de hechos objetivos.
• Especialmente los que para ti fueron muy significativos o te quedaron emocionalmente grabados y que el otro no mira de la misma manera porque quizá no fue consciente del evento.
• Te puedes convertir en una persona pasivo-agresiva.
• Como “lo que no se dice se actúa”, vas a empezar a hacer o decir cosas que directa o indirectamente lastimen al otro.
• Dobles mensajes, olvidos, retrasos, accidentes o actitudes y conductas inadecuadas para el tipo de relación que tienen.
• Pueden entrar en un estado de “guerra fría” del que será muy difícil salir.
• Cuando dejamos que un conflicto o malestar se haga viejo, la relación se va deteriorando y cuesta mucho ser el primero que hable para buscar reparar. A veces ya no se sabe cómo hacerlo por mucho que se desee.
¿Si hablo malo, si callo malo; entonces qué hacer?
• Quizá el error consiste en creer que sólo puedes hacer una cosa u otra
• Uno siempre puede callar temporalmente y esperar tener la claridad, emocionalidad y objetividad necesarias para comunicar lo que se siente.
• Lleva primero la fiesta en paz con tus emociones y después comunícalas con más asertividad.
• He aquí algunas recomendaciones para que puedas decir lo que sientes buscando llevar la fiesta en paz.
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Identifica lo que sientes
Es muy fácil decir algo distinto a lo que realmente se siente cuando se está enojado. Decir las cosas con enojo es una clara señal de que te percibes débil, sin poder y muy vulnerable.
Encuentra la manera de calmarte a ti mismo antes de hablar
• Aprende a manejar tu estrés, tu ansiedad o tu resentimiento
• Incluso a veces antes de una conversación significativa vale la pena invertir tiempo aprendiendo a canalizar de manera más sana nuestras emociones.
Ensaya en voz alta lo que vas a decir y cómo lo dices (grábate y escúchate o de menos escríbelo)
• Se trata de que puedas expresar tus sentimientos, pensamientos y necesidades sin que despiertes en la otra persona una actitud defensiva.
• No critiques, no insultes, no invalides, no amenaces y no pongas ultimatums.
• Si lo que escuchas de tí mismo te parece agresivo, regresa al punto anterior.
• Puedes pedir a alguien más que escuche o lea tu “ensayo” y que te diga qué siente.
Siempre incluye una petición en tus reclamos
• Un reclamo sin petición es una simple queja y eso no lleva a resolver el conflicto.
• Esto fácilmente se puede convertir en una cadena de acusaciones y contra acusaciones.
• Pide algo que sea posible, que no atente contra la dignidad del otro y que sea claro.
• “Me gustaría que reconocieras que con esto me has lastimado”
No castigues al otro por sus acciones
• Si la relación es importante para ti, ayúdale a entender por qué lo es y cómo el que traspase tus límites te lastima
• Si le importas buscará evitar hacer eso que te duele.
Escucha su punto de vista y su a,propio sentir
• No es un monólogo. Es verdad que hay personas que aprendieron a mentir o justificarse para defenderse, pero hay también quien genuinamente puede reconocer que actuó mal, pero que su intención no fue lastimarte
• Quien te ha lastimado, como muestra de buena voluntad, debe detener de inmediato la conducta que lastima antes de pedirte perdón.
Recuerda
El problema no son Ustedes, es la forma de interactuar, comunicarse y respetar los límites de cada uno, además del tiempo que han dejado pasar sin buscar hablar de esto lo que ha empeorado la situación.