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2024-12-18 21:20:02

Cómo saber si tus hijos son felices

Según psicólogos españoles el 50% de la felicidad se debe a factores genéticos, un 10% a las circunstancias vividas, y el 40% a la actividad emocional que podemos aprender a controlar para ser más felices

mayo 16, 2012

HIJOSNancy Steinberg
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Un grupo de psicólogos españoles desollaron “El Proyecto Felicidad” con 8 claves para niños más felices:
1. Ser amable. Niños amables experimentan más satisfacción y energía, son más cariñosos y agradables, y gozan de aceptación social.
2. Dar las gracias. La gratitud favorece la estabilidad mental y enriquece el crecimiento de los niños. Los niños valoran más lo que tienen y a su entorno.
3. Ser positivo. Los niños educados en un entorno positivo son más seguros y creen más en sí mismos. Tienen mayor control de su mente.
4. No etiquetar. Se debe evitar rotular a los niños. Decirles «eres malo», «eres llorón», les predisponen a moldear su actitud para encajar en este perfil.
5. No dramatizar. Debemos dar su justo valor a las cosas y a las situaciones. Debemos extinguir conductas como pegar, insultar o faltar al respeto.
6. Logro personal. Los niños son más felices si consiguen sus objetivos por sus propios méritos. Debemos animarles en este sentido.
7. Autonomía. Estimular la independencia de los niños, potenciará su autoestima, su seguridad y la confianza en sí mismos.
8. Inteligencia emocional. Los niños deben aprender a controlar y regular sus emociones para resolver los problemas de manera pacífica. Eso genera tranquilidad y armonía en su carácter.

La preocupación fundamental de los padres solía centrarse en:

  • el rendimiento académico de los niños
  • en sus posibilidades de tener éxito en la vida
  • ser aceptados socialmen
  • tener la capacidad para terminar una carrera profesional

Pero hoy nos preocupa más el desarrollo emocional de los niños

  • En los primeros seis meses de vida, los bebés lloran más de lo que ríen; esto parece deberse a que los bebés aprenden a reconocer la incomodidad antes que la alegría.
  • Este interesante descubrimiento obedece a razones de maduración neurológica, pero es de enorme utilidad para la sobre vivencia del bebé: el llanto del bebé funciona como una llamada de alerta para que la madre pueda responder a sus necesidades
  • Es a través de la convivencia diaria con su bebé, que cada madre aprende a reconocer los diferentes tipos de llanto de su hijo.
  • Desde una edad muy temprana los bebés comienzan a tener expresiones faciales – y corporales – que los adultos interpretamos como “está feliz,” “está triste,” “está enojado,” etc.

Pero hoy se sabe que el cerebro del bebé no está lo suficientemente maduro para comenzar a sentir las emociones hasta alrededor de los seis u ocho meses de edad.

  • A partir de los seis meses de edad, empieza a haber una relación más clara entre las expresiones faciales y corporales asociadas con las emociones, y las emociones que el bebé está experimentando.

Alrededor de los dos años de edad, podemos ver que un niño feliz:

  • Sonríe
  • Juega
  • muestra curiosidad por conocer su entorno
  • parece interesarse cuando hay otros niños pequeños a su alrededor
  • no necesita de la atención y estimulación constante de los adultos a su alrededor

Y lo contrario es cierto para los niños que no son felices: se muestran retraídos, no comen bien, no se involucran con otros niños pequeños, no juegan, no parece mostrarse interesados por el ambiente que les rodea, no sonríen y tienen un lenguaje poco desarrollado.

  • Lo cierto es que los niños felices vienen en todos los colores, tamaños y sabores; son como todos los niños: tienen problemas, lloran cuando están tristes y a veces hacen berrinches.
  • Pero lo más importante es que han aprendido a levantarse cuando se caen, se sienten seguros y confiados del amor de sus padres y, por lo regular, se divierten y disfrutan con las actividades que realizan.

Algunas características de los niños felices:

  • Están en constante movimiento: bien podemos decir que, entre más se mueve un niño, más aprende
  • Son capaces de confiar en los adultos y experimentar sentimientos positivos como la gratitud y la bondatinen una alta inteligencia emocional: son capaces de reconocer y expresar sus emociones
  • tienen una alta tolerancia a la frustración: disfrutan al ir superando los nuevos retos que enfrentan en la vida, se sienten orgullosos de sus logros y son capaces de mantener el interés en una actividad a pesar de que ésta sea difícil
  • son capaces de pedir ayuda cuando no pueden encontrar la solución por sí mismos
  • les gusta investigar, conocer a las personas y al mundo que les rodea
  • son muy sociables, tienen amigos de todas las edades
  • duermen bien: su sueño es profundo, se levantan descansados y listos para enfrentar un nuevo día
  • comen bien, les gusta probar de todo y comen con buen apetito

En lo que respecta a niños mayores, en un estudio llevado a cabo en Canadá con niños entre 8 y12 años, se encontró que los niños más felices son los que sienten que su vida tiene sentido y los que desarrollan relaciones interpersonales más profundas.

mayo 16, 2012