¿Cómo nos afecta el antropocentrismo en la vida diaria y qué podemos hacer para no caer en ella? Aquí les van a explicar todo, para que además de analizar lo que pasa en el mundo estén bien informados.
Texto por Jafet Quintero, Maestro en Geografía
¿Qué es el antropocentrismo?
Es una forma colectiva de pensar, que sostiene que los seres humanos son los ejes centrales y los más significativos del mundo. Es una creencia arraigada que considera a los humanos como algo separado y superior a la naturaleza, y sostiene que la vida humana tiene un valor intrínseco, mientras que otras entidades: los animales, las plantas, los recursos minerales y naturales son recursos que pueden explotarse justificadamente en beneficio de la humanidad.
¿Cómo nos afecta el antropocentrismo en la vida?
Muchos filósofos, particularmente especialistas en ética y bioética, encuentran las raíces del antropocentrismo en el libro del Génesis de la Biblia judeocristiana, cuando se menciona que los humanos son creados a imagen y semejanza de Dios, y reciben instrucciones de “someter” la Tierra y “tener dominio” sobre todos los otros seres vivos.
Este pasaje ha sido interpretado como una indicación de la superioridad de la humanidad sobre la naturaleza y como una condonación de una visión instrumental de la misma, donde el mundo natural tiene valor sólo en la medida en que beneficia a la humanidad. Esta línea de pensamiento no se limita a la teología judía y cristiana y se puede encontrar en la política de Aristóteles y en la filosofía moral de Immanuel Kant.
Algunos filósofos antropocéntricos apoyan el punto de vista humanista, y fuertemente respaldado por las ciencias sociales contemporáneas (incluida la Geografía), que rechaza las afirmaciones de que los recursos de la Tierra son limitados o de que el crecimiento descontrolado de la población humana excederá la capacidad de carga de la Tierra y resultará en guerras y hambrunas a medida que los recursos escaseen.
De hecho, también sostienen que las proyecciones de las limitaciones de recursos y el crecimiento de la población son exageradas o que la tecnología se desarrollará según sea necesario para resolver futuros problemas de escasez. En cualquier caso, no ven ninguna necesidad moral o práctica de controles legales para proteger el medio ambiente natural o limitar su explotación.
Por otro lado, desde la ética ambiental se ha sugerido que es posible valorar el medio ambiente sin descartar el antropocentrismo. Esta visión, a veces llamada antropocentrismo prudencial, sostiene que los humanos tienen obligaciones éticas hacia el medio ambiente, pero pueden justificarse en términos de obligaciones hacia otros humanos.
Por ejemplo, la contaminación ambiental puede considerarse inmoral porque afecta negativamente la vida de otras personas, como las que se enferman por la contaminación del aire de una fábrica. De manera similar, el uso despilfarrado de los recursos naturales se considera inmoral porque priva a las generaciones futuras de esos recursos.
No dejen de leer: La envidia, el veneno que se refleja
La ética ambiental y el biocentrismo
Antes del surgimiento de la ética ambiental como campo académico, conservacionistas como Aldo Leopold sostenían que el mundo natural tiene un valor intrínseco, un enfoque informado por la apreciación estética de la belleza de la naturaleza, y rechazaban una actitud puramente explotadora.
En la década de 1970, quienes teorizaron en la ética ambiental plantearon dos desafíos fundamentales al antropocentrismo: cuestionaron si los humanos deberían ser considerados superiores a otras criaturas vivientes y sugirieron que el medio ambiente natural podría poseer un valor intrínseco independiente de su utilidad.
La filosofía resultante fue el biocentrismo, que considera a los humanos como una especie entre muchas en un ecosistema determinado y sostiene que el medio ambiente natural es intrínsecamente valioso independientemente de su capacidad para ser explotado por los humanos.
No dejen de leer:
- Los desastres naturales y calentamiento global
- Volverte vegano o vegetariano ¿sí o no?
- Lo que puedes hacer para reducir el calentamiento global