Juan Pablo Arredondo
Psicólogo familiar
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¿Cómo hablar con los niños sobre secretos?
Evidentemente se trata de un tema delicado y polémico. Definir la cuestión de los secretos en los niños tiene varias aristas que tendrán que considerarse. Por ejemplo lo que tiene que ver con las mentiras, con el ocultamiento de la verdad y la verdad misma. Hablar de los secretos con los niños implica todo un esquema de la estructura familiar. Existen familias en donde la información suele ser abierta con los hijos y otras, por el contrario, en donde la dinámica pareciera ser permanentemente el ocultamiento de la información.
Hablar de estos temas tendría que ser igual que hablar de cualquier otro tema importante con los niños. Será de manera natural, tranquila, espontánea y considerando perfectamente no sobre informar al niño. Es claro que esto puede resultar difícil, pero también son parámetros que se pueden considerar para hacerlo de la mejor manera posible.
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¿Cuáles son los secretos que no deben saber los niños?
Normalmente la información que los niños tienen naturalmente por la convivencia día a día es más amplia de lo que suponemos. Ellos se percatan de una gran cantidad de detalles que perfectamente podríamos creer que no se enteran, pero lo hacen. Muchas de las veces cuando hablamos con ellos lo único que hacemos es confirmarles la información que ya tenían.
La información que no debería de llegarles es aquella que los sobre informa, aquella que no están en deseo, posibilidad o actitud de recibir, a aquella que se sabe no podría digerir. En ocasiones, las adopciones, están dadas en esquemas tan complejos, que hablarlo con los niños resultaría sumamente complicado. El que el papá no sea el papá, o la mamá no sea la mamá, puede ser otro tema delicado y que posiblemente, por el manejo previo, deba de ocultarse. Sin embargo, la recomendación es siempre en estos casos, ventilar la información desde pequeños y así se evitan problemas más complejos.
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¿Qué secretos nunca debes esconderle a un niño?
Temas como la adopción, las enfermedades, las muertes de familiares, las separaciones, los divorcios, son situaciones que no deberían acultarse a los niños. Tenemos que recordar que nosotros los adultos tenemos que preparar a nuestros hijos para la vida y la vida representa enfrentarse a todas estas situaciones y aprender a sobre llevarlas, a fortalecerse y a vivir con ellas.
Debes preguntarle a tus hijos que si guarda un secreto. Tiene que haber comunicación, confianza y vinculación con ellos.
Los niños y jóvenes tienen que tener claro que los secretos no siempre son representaciones y garantía de lealtad, sino que en ocasiones se trata de complicidad, y esto legalmente, es un delito.
Los secretos cuando se descubren suele ser lastimosos y generar resentimiento, además de que rompen con dos de los principales valores que deben reforzar en nuestros hijos: la confianza y la credibilidad.
