Si nuestra familia presidencial fue a Londres y los pasearon de aquí para allá, es justo que ahora nos manden al 007. Acá se los atendemos con una sonrisa franca.
Cumplimos un año y salimos a las calles a compartir el éxito con los voceadores.
Moi llega a su primer año. Y estos son los mejores momentos de la celebración.
Si te dan a elegir entre unas vacaciones de ensueño a unas modestas pero sin preocuparte de dinero ¿qué eliges?
¡Gracias a todos ustedes lo logramos! El primero de muchos más.
A las plantas, como a varios de nosotros, les urge vivir alejadas de sus padres.
Aristegui comparte como nunca, se carcajea como pocas y no habla de política como siempre.
¡Lo logrado, logrado está! Así que si estás en la playa, reconcíliate con tu cuerpo y ¡pásala chido! (afortunadamente las mujeres están menos obsesionadas con nuestros cuerpos, creo).
Hay promesas que nunca se cumplen. Como aquella en la que abusando de tu inocencia infantil te prometen que en algún momento de tu productiva vida de adulto agradecerás haber aprendido a sacar la raíz cuadrada. Y ese día, nunca llega.