Tenemos que hablar de bulimia y anorexia en adolescentes

Vamos a hablar de un tema súper importante como lo es la anorexia y la bulimia, y tenemos dos testimonios que nos van a contar cómo es vivir y salir adelante con un trastorno de la conducta alimentaria.

Chequen este dato: Según un estudio de la UNAM, se estima que el 25% de los adolescentes en México padece algún grado de trastorno de la conducta alimentaria (TCA), la mayoría de los casos asociados a problemas de salud mental. Menos del 10% de los afectados recibe tratamiento.

¿Qué onda con la bulimia y anorexia en México?

Según un estudio de la UNAM, se estima que el 25% de los adolescentes en México padece algún grado de trastorno de la conducta alimentaria (TCA); la mayoría de los casos asociados a problemas de salud mental. Menos del 10% de los afectados recibe tratamiento.

Cada año, en México, se registran aproximadamente 22,000 casos de TCA (Trastorno de Conducta Alimentaria) en jóvenes de entre 13 y 18 años, afectando principalmente a mujeres en una proporción de 9 a 1 en comparación con los hombres.

Las niñas son más propensas a presentar estos síntomas, con una prevalencia del 30% en comparación con el 17% en niños. A nivel mundial, entre el 1% y el 4% de la población adolescente femenina ha padecido anorexia nerviosa y entre el 1% y el 2% en el mismo grupo demográfico bulimia nerviosa.

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¿Qué es la anorexia?

El término «anorexia» por sí solo significa la pérdida del apetito, pero no implica necesariamente un trastorno alimentario. Puede ser un síntoma de diversas enfermedades o condiciones médicas. Por otro lado, la anorexia nerviosa es una condición psiquiátrica específica clasificada dentro de los Trastornos de la Conducta Alimentaria (TCA).

La anorexia nerviosa es un trastorno grave de la conducta alimentaria que se caracteriza por una restricción extrema de la ingesta calórica, un miedo intenso a ganar peso y una percepción distorsionada de la imagen corporal. La anorexia nerviosa suele comenzar entre los 12 y 25 años, con un pico de incidencia en la adolescencia, especialmente entre los 15 y 19 años. Sin embargo, cada vez se han reportado casos en edades más tempranas.

La anorexia nerviosa es un trastorno complejo con múltiples factores de origen:

Factores biológicos: Predisposición genética y alteraciones neuroquímicas.
Factores psicológicos: Baja autoestima, perfeccionismo extremo, necesidad de control y ansiedad.
Factores socioculturales: Presión de los estándares de belleza y la influencia de redes sociales.
Factores familiares: Dinámicas conflictivas, sobreprotección o presión por el rendimiento.

La adolescencia es una etapa de gran influencia social, donde los ideales de delgadez pueden generar presión para modificar la alimentación y la imagen corporal. La exposición a contenido que promueve cuerpos irreales y dietas extremas aumenta el riesgo de desarrollar TCA en edades más jóvenes.

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¿Cuáles son los síntomas?

Entre las señales clásicas de la anorexia son:

Restricción severa de la alimentación.
Pérdida de peso significativa y desnutrición.
Miedo intenso a aumentar de peso o engordar.
Percepción distorsionada del cuerpo y autoimagen negativa.
Amenorrea (ausencia de menstruación en mujeres).
Fatiga, mareos y problemas de concentración.
Problemas gastrointestinales, piel seca y caída del pelo.

¿Cuáles son los tipos de anorexia?

Anorexia restrictiva: Se caracteriza por una reducción drástica en la ingesta de alimentos sin comportamientos de purga.

Anorexia purgativa: Además de la restricción alimentaria, incluye episodios de purga mediante vómitos autoinducidos o el uso excesivo de laxantes y diuréticos.

Pero no todo está perdido, el tratamiento debe ser integral y personalizado, incluyendo:

Atención médica: Supervisión del estado físico y tratamiento de complicaciones derivadas de la desnutrición.
Psicoterapia: Terapia cognitivo-conductual (TCC) para modificar patrones de pensamiento y comportamiento disfuncionales.
Nutrición: Reeducación alimentaria con apoyo de un especialista en nutrición.
Apoyo familiar: Involucrar a la familia en el proceso de recuperación para generar un entorno saludable.
Medicación: En algunos casos, el uso de antidepresivos o ansiolíticos puede ser útil como parte del tratamiento.

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¿Qué es la bulimia?

La bulimia nerviosa es un trastorno de la conducta alimentaria caracterizado por episodios recurrentes de atracones seguidos de conductas compensatorias inapropiadas, como el vómito autoinducido, el uso excesivo de laxantes o el ejercicio extremo.

Las causas de la bulimia, que es un trastorno multifactorial, son influenciados por:

Factores biológicos: Predisposición genética y alteraciones en la regulación de la serotonina.
Factores psicológicos: Baja autoestima, perfeccionismo, ansiedad y depresión.
Factores socioculturales: Presión por los estándares de belleza y la influencia de los medios de comunicación.
Factores familiares: Dinámicas conflictivas, historia de abuso o presión por el control del peso.

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¿Cuáles son los síntomas?

Entre los síntomas que tienen las personas que padecen este trastorno están:

Episodios de ingesta excesiva de alimentos en un corto periodo de tiempo.
Sensación de pérdida de control durante los atracones.
Conductas compensatorias como vómitos autoinducidos, uso de laxantes o diuréticos y ejercicio excesivo.
Miedo intenso a ganar peso.
Autoestima fuertemente influenciada por la percepción corporal.
Problemas digestivos, deshidratación y desequilibrios electrolíticos.
Ansiedad, depresión y aislamiento social.

¿Cuáles son los tipos de bulimia?

Existen dos tipos que se presentan comúnmente y son:

Bulimia purgativa: Se caracteriza por el uso de vómitos, laxantes, diuréticos o enemas para compensar los atracones.
Bulimia no purgativa: Incluye otras formas de compensación, como el ayuno prolongado o el ejercicio excesivo, sin recurrir a métodos purgativos.

¿Cuál es el tratamiento?

El tratamiento debe ser interdisciplinario y adaptado a cada paciente:

Atención médica: Control de complicaciones físicas derivadas de la bulimia, como desequilibrios electrolíticos o problemas digestivos.
Psicoterapia: Terapia cognitivo-conductual (TCC) para modificar patrones de pensamiento y comportamiento asociados con la enfermedad.
Nutrición: Educación nutricional y desarrollo de hábitos alimenticios saludables con la ayuda de un especialista.
Apoyo familiar: Involucrar a la familia en el proceso terapéutico para generar un entorno de apoyo.
Medicación: En algunos casos, se pueden prescribir antidepresivos para tratar síntomas asociados, como la ansiedad o la depresión.

¿Cómo vive una persona con anorexia?

Muchas personas empiezan cuando se obsesionan con el ejercicio, comen enfrente de las personas pero les llega la sensación de querer ‘quemar’ todo después.

Siempre tienen miedo a la comida, por ejemplo le quitan la grasa a la pizza y hacen ejercicio antes de dormir cuando sienten que se excede al comer. También cuando van a comidas familiares comen ensalada en lugar de hamburguesas o comen poco.

Esto puede llevar a un estado grave de desnutrición y restricción alimentaria. Algunos pacientes terminan en hospitalización por varias semanas, tratamiento ambulatorio intensivo, con apoyo nutricional, psicológico, psiquiátrico desde un inicio, y acompañamiento familiar.

Especialista: Armando Barriguete. Doctor en Psicoterapia Psicoanalítica por la Asociación Psicoanalítica Mexicana. Consultor de trastornos de la Conducta Alimentaria y Obesidad del Instituto Nacional de Ciencias Médicas y Nutrición. Director Fundador de Clínica Ángeles de Trastornos de la Conducta Alimentaria. Autor del libro “Para entender la alimentación” de Nostra Ediciones.

TW: @Barriguete1 / IG:@dr.barriguete / Tel: 55 5281 7301