fbpx
2025-04-12 03:34:29
triangulo-amoroso-niña-interior-niño-interior

Triángulo amoroso: tú, tu pareja y tu niña emocional

Los triángulos amorosos son señales de traumas infantiles. Descubre su influencia en el amor y la sexualidad.

abril 7, 2025

¿Se han cachado que siempre encuentran la manera de sabotear una relación en la que están? Puede que su niña emocional está haciendo de las suyas.

Algunas mujeres se sienten atraídas a lo prohibido, que si al novio de la amiga, al casado de la oficina o hasta el chavo del antro que trae a la novia y esto tiene que ver con la niña interior que ha sido herida, si eres así o tienes una amiga así, sigue leyendo lo que Aura Median Witt nos explica a continuación. 

¿Qué es eso de la niña interior?

Esa parte que llamamos tan tiernamente “niña interior” es básicamente la parte emocional de cada persona que se quedó “atorada” en su línea de tiempo, es decir, ese aspecto de nuestra conciencia que es inmadura e infantil.

En general no somos muy conscientes de esta parte, ya que hemos pasado años tratando de esconder los traumas y dolores que la crearon y compensando para vernos “muy adultas”

Entre más la neguemos, la escondamos, la ignoremos más va a controlar diferentes aspectos de nuestras vidas de adultos, muy especialmente en aquellos aspectos que tienen que ver con nuestras relaciones románticas y sexuales.

No dejen de leer: La sanación espiritual empieza con el niño interior

Triángulos amorosos y las heridas de la infancia 

Los triángulos amorosos y sexuales en los que caemos de adultos son una manifestación muy clara de asuntos no resueltos en la infancia.  Como dije antes, si estos asuntos no se resuelven de manera consciente tendrán repercusiones a lo largo de toda nuestra vida adulta.

Cuando no se han creado los vínculos necesarios con ambos padres, cuando las necesidades propias de las diferentes etapas de desarrollo no se satisfacen quedan los vacíos emocionales, traumas o lo que se conoce como heridas de la infancia.

Este es un tema muy complejo y si eres mujer buscando esta información, te recomiendo mi libro de «Sanando la Herida Materna» (aquí lo puedes comprar) donde toco este tema a profundidad, pero intentaré aquí reducirlo y explicarlo de una manera muy sencilla y breve.

También pueden leer: Tu niño interior puede ser el verdugo en la educación de los hijos

¿Cómo sanar a esa niña interior que te está saboteando?

Si como niña, tu madre no supo vincularse contigo y no te dio la atención que requerías en ese período, es muy probable que tornes tu atención a papá, buscando su mirada, buscando esa reafirmación de tu valor, de tu ser.

Y es posible que haya incluso un deseo inconsciente de “castigar” a mamá quitándole a papá o al menos de llamar su atención, todo originado en la necesidad de la niña de ser “vista” por la madre, algo que es bien importante en su desarrollo. Y la cuestión es que la niña nunca encontrará lo que busca en el padre, porque es la madre la que debe dárselo.

Estas niñas, ya de adultas se encuentran repitiendo el patrón de involucrarse en estos “triángulos amorosos /sexuales, siendo frecuentemente atraídas por hombres (o mujeres) que están en otra relación. Es el intento de la “niña interior” de conseguir la atención de la mamá, pero hacerlo a través de seducir a su pareja».

El niño se comporta de una manera similar, también requiere de ese vínculo y espejeo materno en sus primeros meses, años. E igualmente, si no lo obtiene seguirá buscándolo a lo largo de su vida, en mujeres – u hombres- que ya estén con una pareja.

En resumen…

Si el triángulo emocional no se resuelve en nuestro interior, buscaremos recrearlo, una o varias veces, porque a un nivel inconsciente esperamos encontrar una forma para sanarlo.

Estamos intentando satisfacer necesidades emocionales no resueltas o buscar validación. La sexualidad contiene muchos niveles emocionales que no son siempre conscientes.

Un hombre puede pasarse la vida intentando ganar el amor de su padre al demostrar lo muy macho que es. Una mujer puede intentar ganar el amor y la admiración de su madre de la misma manera, castigando a otras mujeres por el fracaso de su madre a la hora de amarla.

El rival en un triángulo adulto puede ser secretamente mucho más importante para el individuo que el aparente objeto del deseo.

Alguien con un niño interior herido puede sentirse inseguro y buscar la aprobación y el amor a través de relaciones complicadas. Los triángulos amorosos pueden ser una manifestación de la inseguridad y la necesidad de atención o amor.

En resumen, es muy posible que nuestras vivencias y experiencias de la infancia y la forma en que hemos manejado nuestras emociones influyan en cómo nos comportamos en relaciones románticas, incluidos los triángulos amorosos.

Hacernos conscientes de esto y trabajar para sanar nuestro niño interior es vital para salirnos de estos patrones destructivos y aprender a desarrollar relaciones más sanas y satisfactorias.

Especialista: Aura Medina. Psicoterapeuta transpersonal especializada en codependencia y cómo las heridas de infancia afectan nuestras relaciones de adultos. Autora de los libros: ¿Amor o codependencia?, Lo que ellos dicen de ellas, Crea el espacio para el amor y Sanando la herida materna.

No dejen de leer: 

abril 7, 2025