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Diferentes estudios sugieren que el 52% de los perros mayores de 11 años presentan uno o más síntomas de Demencia Cognitiva Geriátrica. El 68% de los perros que tienen entre 15 y 16 años son diagnosticados con Demencia Cognitiva Geriátrica.
El 43% de los gatos que tienen entre 11 y 15 años presentan signos clínicos de Demencia Cognitiva Geriátrica. El 49% de los gatos mayores de 15 años son diagnosticados con esta enfermedad.
Desorientación
Interacción
Sueño (Ciclo circadiano de sueño)
Micción y defecación
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La Demencia Senil también es conocida como Disfunción Cognitiva Geriátrica en perros
y gatos. Es el “Alzheimer” canino y felino. La disfunción cognitiva en perros y gatos es un problema común en mascotas mayores. Suele presentarse en perros y gatos de más de 11 años de edad.
Es una enfermedad crónico – degenerativa, asociada al envejecimiento del cerebro que disminuye la respuesta a los estímulos y la capacidad de aprendizaje de nuestras mascotas.
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Hay que tomar en cuenta que actualmente los perros y gatos tienen una mejor calidad de vida, desde una mejor alimentación hasta la aplicación de nuevas vacunas. Esto ha provocado que se incremente la esperanza de vida de perros y gatos, y se presenten enfermedades a causa de la edad.
El acrónimo DISHA se utiliza para describir los síntomas clínicos más comunes de la disfunción cognitiva canina (DCC). Los componentes de DISHA son:
Puede presentar comportamientos compulsivos, que son comportamientos repetitivos o ritualizados sin funciones específicas. Por ejemplo: lamiendo la zona de los carpos, marcha en círculos, marcha de un lugar a otro. El sedentarismo acelera el envejecimiento y la presencia de enfermedades geriátricas.
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Evaluación de los signos clínicos: Los veterinarios observan los comportamientos como desorientación, reducción de interacciones, alteraciones en el ciclo de sueño-vigilia, cambios en el comportamiento dentro del hogar y disminución de la actividad.
Exámenes físicos y pruebas diagnósticas: Análisis de sangre y estudios de imágenes para descartar otras enfermedades que puedan causar síntomas similares.
Cambios en el entorno: Proporcionar estímulos mentales y físicos puede ayudar a ralentizar la progresión de la enfermedad. Juguetes interactivos, paseos regulares y entrenamientos simples son beneficiosos.
Terapia nutricional: Dietas especializadas ricas en antioxidantes, ácidos grasos omega-3 y otros nutrientes pueden mejorar la función cognitiva.
Medicamentos: La selegilina es un medicamento comúnmente utilizado para tratar la DCC en perros, ya que puede mejorar la función cognitiva y la calidad de vida. Otros medicamentos incluyen benzodiazepinas y melatonina para manejar los ciclos de sueño/vigilia alterados.
Enriquecimiento ambiental y social: Aumentar las actividades de socialización y proporcionar un entorno estimulante con juegos y actividades.
Especialista: Ernesto Ávila. Veterinario Zootecnista por la UNAM. Director General de La Clínica Veterinaria del Bosque.
Web: veterinariadelbosque.com // FB: clinicaveterinariadelbosque // TW: @VeteridelBosque // Tel: 55-5360-3311 / 55-5240-0404 / 55-8841-5819 / PODCAST en Spotify: Mascotas SOS una producción de Martha Debayle Podcasts