¿Cómo prevenir el pie diabético?

Hoy el Doctor Manuel Marquina nos explica ¿cómo prevenir el pie diabético?, además nos da las señales de alerta y el tratamiento.

La probabilidad de que un paciente diabetico tenga úlceras en los pies es de 34%, al momento en que empiecen a ver que se forma una úlcera es importantísimo que corran al doctor, tanto para curarla lo antes posible, pero ¿cómo prevenir el pie diabético?

LA DIABETES EN MÉXICO

Más de 537 millones de adultos entre 20 y 79 años tienen diabetes en todo el mundo, esto representa el 10% de la población mundial en este grupo de edad. En el continente americano 62 millones de personas padecen diabetes.

La prevalencia para personas diabéticas, de padecer una úlcera en el pie está entre 19-34%. El 70% de las úlceras de pie diabético continúan abiertas tras 20 semanas de tratamiento, y su pronóstico se ve seriamente afectado por la presencia de isquemia o infección.

¿QUÉ ES EL PIE DIABÉTICO?

La diabetes es una afección en la que los niveles de glucosa (azúcar) en sangre son muy altos. La hormona llamada insulina ayuda a que la glucosa entre a las células. En la diabetes tipo 1, el cuerpo no produce insulina y en la diabetes tipo 2, el cuerpo no produce insulina ni la usa de manera adecuada. Sin suficiente insulina, la glucosa no puede entrar a sus células tan rápido como de costumbre. La glucosa se acumula en la sangre y provoca niveles altos de azúcar en sangre.

Los problemas en los pies son comunes en personas con diabetes. Pueden ocurrir con el tiempo cuando los niveles altos de azúcar en sangre dañan los nervios y los vasos sanguíneos de los pies. El daño a los nervios, se llama neuropatía diabética.

Si no puedes sentir dolor, es posible que no te des cuenta si tienes un corte, una ampolla o una úlcera (llaga abierta) en el pie. Esta herida puede. Es posible que la infección no se cure bien porque los vasos sanguíneos dañados pueden causar un deficiente flujo sanguíneo en los pies.

¿CUÁLES SON LOS SÍNTOMAS Y COMPLICACIONES?

La complicación crónica que ocurre en los pies de los pacientes diabéticos mal controlados se presenta de estas maneras:

Disminución de la sensibilidad (Neuropatía diabética)
Disminución de la circulación sanguínea (Insuficiencia arterial)
Deformidades de huesos, tendones y articulaciones (Pie de Charcot)
Infección de piel, huesos, tendones, articulaciones y úlceras

Una de las complicaciones más importante es la neuropatía diabética periférica: Se presenta con muchas molestias en las extremidades inferiores (piernas), como dolor, ardor, hormigueos, piquetes, calambres, adormecimiento, falta de sensibilidad, callosidades, úlceras por insensibilidad y úlceras en pies y piernas.

Infecciones recurrentes: Esto derivado de la mala cicatrización de las heridas.
Deformidad en dedos y pies
Mala circulación sanguínea: Esto desemboca en presentar gangrena de los dedos y pies, y por lo tanto amputación de dedos, partes del pie o toda la extremidad.

¿CÓMO SE PUEDE PREVENIR EL PIE DIABÉTICO?

Se hace una valoración clínica que tarda 5 minutos, donde se revisa la circulación arterial, circulación venosa, sensibilidad superficial y profunda, el estado de la piel, huesos y articulaciones. En casos de mayor riesgo aparente o evidente, se realizan estudios especiales para determinar la gravedad y tratamiento.

La mejor manera de proteger los pies es controlando sus niveles de azúcar en sangre todos los días. Esto ayudará a evitar que el daño a los nervios y vasos sanguíneos empeore. El siguiente paso es mantener sana la piel de sus pies.

Revisarse los pies todos los días: Busca cortes, enrojecimiento y otros cambios en la piel y las uñas de los pies, incluyendo verrugas u otras manchas que sus zapatos podrían frotar.
Lavarse los pies todos los días: Usar agua tibia y jabón. No remojarlos porque eso puede resecar la piel, usar talco entre los dedos.
Cortar las uñas de los pies en línea recta con un cortauñas
Siempre usar zapatos que te queden cómodos y calcetines: No se recomienda caminar descalzo, ni siquiera en interiores.
Proteger los pies del calor y el frío: Usar protector solar en la piel expuesta y no caminar descalzo en la playa. En clima frío, usar calcetines gruesos en lugar de calentar los pies cerca de un calentador o chimenea
Mantener la sangre fluyendo por sus pies: Levantar los pies cuando estés sentado. Mover los dedos de los pies y hacer círculos con los pies a lo largo del día.

Fuente: Manuel Marquina, Angiólogo, Cirujano Vascular y Endovascular, certificado por el Consejo Mexicano de Angiología y Cirugía Vascular. Miembro de la Sociedad Mexicana de Angiología y Cirugía Vascular. Experto en el tratamiento de várices, accesos vasculares, enfermedad arteria femoral, enfermedades de carótidas, aneurisma de aorta abdominal y accesos vasculares.

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