Desde las causas hasta los posibles tratamientos, Mercedes D’Acosta nos va a decir qué onda con la ciática y por qué afecta al 84% de las personas en algún momento de su vida.
¿Qué onda con la ciática?
La ciática puede afectar al 84% de las personas en algún momento de su vida (rango del 11 a 84%). Lo anterior sugiere que 9 de cada 10 sujetos tendrá dolor en algún momento. De acuerdo con Medlineplus, los hombres entre 30 y 50 años son más propensos a desarrollar ciática.
La ciática presenta costos asociados a las incapacidades laborales, aproximadamente 30% de los pacientes en México requieren incapacidad. En el Reino Unido, el ausentismo asociado a esta enfermedad es del 13%, mientras que en la Unión Americana es del 33%.
Un estudio de Research and Markets, sugiere que la industria médica sobre el tratamiento de la ciática se valoró en 678 millones de dólares en 2021, y se estima que alcanzará los 991 millones de dólares en 2031. Más del 80% de personas sufren un episodio de lumbociática a lo largo de su vida y en más del 85% la causa es inespecífica.
En un informe de la Organización Mundial de la Salud (OMS), se estimó que 619 millones de personas padecen lumbalgia, que a menudo está relacionada con problemas de ciática. En cuanto a la ciatalgia, una forma de ciática, se menciona que afecta a cerca del 5% de las personas que padecen dolor lumbar.
Según la UNAM, la lumbalgia es un problema frecuente que afecta a 80 de cada 100 personas y se incrementa en aquellas que padecen de obesidad. Según la Organización Mundial de la Salud (OMS) la lumbalgia es la primera causa de consulta a nivel mundial (70%) donde solo el 4% requiere de cirugía.
¿Por qué tenemos dolor en la ciática?
Se refiere al dolor en el nervio ciático, este abarca desde la parte baja de la espalda, pasando por las caderas y los glúteos, hasta llegar a cada pierna. Ocurre cuando una hernia de disco o el crecimiento excesivo de un hueso ejercen presión sobre una parte del nervio. Esto causa inflamación, dolor y, con frecuencia, algo de entumecimiento en la pierna afectada.
Aunque el dolor asociado a la ciática puede ser intenso, la mayoría de los casos desaparecen con el tratamiento en pocas semanas. Las personas que presentan una ciática grave y debilidad significativa en las piernas o cambios en el intestino o la vejiga podrían necesitar cirugía.
Es común tanto en hombres como en mujeres de cualquier edad, en niños y es muy común que lo sufran las mujeres embarazadas especialmente en los últimos meses de embarazo. Los síntomas y su intensidad dependen generalmente del número de fibras involucradas.
El Nervio Ciático tiene muchas ramificaciones, su origen es en las últimas 2 lumbares y en el sacro; se une para formar el nervio más grande y más ancho de todo el cuerpo y al llegar a la rodilla vuelve a ramificarse hasta enervar hasta los pies. Pasa a través de la pelvis por el foramen ciático mayor y por debajo del Músculo Piriforme hacia las piernas y los pies. El Nervio Ciático se encarga de transmitir sensación y función a toda la parte de atrás de las piernas, nalgas y hasta los pies.
Cuando hay una irritación en el Nervio Ciático los síntomas más comunes son:
- Adormecimiento o falta de sensación en la parte de atrás de la pierna
- Dolor en la nalga, en una zona o en toda la parte de atrás de la pierna
- Sensación de electricidad, toques o piquetes en nalga o pierna
- Falta de fuerza en la pierna
- Hormigueo en la parte de atrás de la pierna o en los pies
- Falta de desarrollo de algunos músculos
- Generalmente aumenta con algunos movimientos
ALERTA: Si además de los síntomas anteriores, se desarrolla un problema de incontinencia y/o Baja función intestinal puede ser un Síndrome de Cauda Equina o Cola de Caballo y es muy importante acudir con el especialista inmediatamente.
Las causas más comunes de irritación del Nervio Ciático:
- Una vértebra desajustada (fuera de lugar) que irrita al Nervio directamente
- Una Espondilolistesis
- La Pelvis desajustada
- Un desajuste de Sacro
- Una mezcla de desajustes
- Una hernia de disco
- Estenosis o Canal estrecho
Cuando alguna de las anteriores ocurre, provoca una degeneración en la articulación que complica con el tiempo cualquier condición. Hay hábitos, mañas y movimientos que hacemos regularmente que nos pueden llevar a un dolor de Nervio Ciático:
- Una caída o accidente
- Usar la cartera en la nalga y sentarnos en ella
- Estar sentado resbalado en la silla o mucho tiempo sentado
- Cargar cosas doblando la cintura y sin doblar las rodillas
- Barrer o trapear doblando y girando la cintura
- El Embarazo, especialmente en los últimos meses de gestación
- Hacer movimientos flexionando la columna y girándola al mismo tiempo.
- Aparatos con mucho peso en el gimnasio
- El sobrepeso
¿Cómo nos ayuda el quiropráctico?
El Quiropráctico es el especialista ideal para revisar este tipo de casos, no sólo por tener la capacidad de referir al Ortopedista, Neurocirujano, Fisioterapeuta o especialista indicado para el caso específico, sino que en la mayoría de los casos puede solucionar el caso porque justamente estamos capacitados para liberar al Sistema Nervioso cuando hay una desalineación en la columna llamada “Subluxación Vertebral”.
Cuando hay una Subluxación Vertebral o desajuste, pudiera parecer insignificante y milimétrico en los estudios pero la constante irritación genera irritación, inflamación, dolor, degeneración y disminución en la calidad de vida. El Quiropráctico mediante la clínica y estudios de imagen puede decidir el tratamiento y orientar al paciente en caso de que requiera un tratamiento multidisciplinario o ser referido.
Cada caso es distinto y requiere una valoración particular y específica, es muy importante acudir con el especialista capacitado y con Cédula Profesional.
Fuente: Mercedes D’Acosta. Representante de Latinoamérica en la Federación Internacional de Quiropráctica Deportiva. Expresidente de la Federación Mexicana de Quiropráctica Deportiva. Internacional Certified Sports Chiropractor.
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