Rebeca Muñoz Cornejo
Pionera como Mind Coach. Creadora del método de “Dietasconductuales” en el proceso de Coaching.
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Sin duda, hoy más que nunca, se necesitan estas 4 familias de habilidades para poder hacer frente a esta nueva realidad.
Para abordar este tema debemos empezar con la definición de conceptos muy importantes.
El cambio es lo que siempre permanece y es importantísimo adaptarse a él de la manera más rápida posible.
Proceso de cambio: El proceso de cambio, tiene diferentes zonas
Zona de confort: aquí te sientes seguro y cómodo haciendo lo que haces.
Zona de miedo: Crees que no puedes hacer algo, tienes miedo al cambio, te afectan las opiniones de los demás. (¡aguas!, el cambio de regreso es muy fácil).
Zona de aprendizaje: Los desafíos y problemas hacen que aprendas y amplíes tu zona de confort.
Cambio: Al superar los retos consigues superar tus miedos y ser más hábil y competente. (Cuando te adaptas, creces).
Lo importante hoy no es el cambio si no la velocidad con la que te adaptes a él.
Propósito: Lo que da significado a la vida, a lo que haces. Es lo que anima a hacer o no hacer algo.
Se debe diferenciar de meta y objetivo:
Meta: Algo que se quiere TENER
Objetivo: Algo que se tiene que HACER
Propósito: Lo que se quiere SER.
Habilidad: Algo que haces muy bien y mientras más lo repites, mejor se desarrolla.
Hay 4 familias de habilidades que se deben dominar
TÉCNICAS: Herramientas que te permiten sistematizar procesos y ordenar la información, para que con ella decidas las acciones a realizar dentro de tu entorno.
Ejemplos:
Administrar correctamente los recursos materiales con los que cuentas.
Utilizar la tecnología en pro de tus objetivos.
Dar seguimiento a los acuerdos hechos.
Priorizar tareas dentro de tu gestión diaria.
HUMANÍSTICAS: Habilidades que te permiten tener un mejor relacionamiento con las personas que te rodean.
Ejemplos:
Mantener una alta tolerancia a la frustración.
Mantener un alta inteligencia emocional.
Saber comunicar tus ideas de forma clara.
Mantener un alta automotivación.
CONCEPTUALES: Ver el todo y por partes. Ver el árbol y el bosque.
Ejemplos:
Mantener una visión de negocio.
Ser consciente del impacto de tu gestión en tu entorno.
Tener una visión orientada a los resultados.
Ser perseverante y marcarse metas retadoras.
COMERCIALES: Habilidades que permiten realizar una venta.
Ejemplos:
Saber negociar.
Saber detectar oportunidades de negocio.
Saber argumentar.
Saber segmentar el mercado al cual está dirigido el negocio.