Miguel Ángel Rojas, 39 años.
Tiene 19 como voceador, empezó a los 20 años.
La profesión se la heredaron sus papás.
Se despierta a las 4 am y vende desde 5:30 a 6:00
Lo que más le gusta es estar en la calle.
Anécdota graciosa: Cuando llegaban los clientes a preguntarle por la revista MOI, como no sabían pronunciar el nombre, la negaban.
Cosas malas: La inseguridad, lo han asaltado una vez
Lo malo: La venta ha ido bajando muchísimo en los últimos 10 años, por los medios digitales.
Alejandro López Neri, 62 años
Tiene más de 40 años de ser voceador
Empezó a ser voceador a los 17 años
La profesión se la heredaron sus papás
Lo que ama de su chamba es conocer gente, estar en la calle.
Anécdota graciosa: iba en bicicleta con todos los periódicos, tuvo un accidente y arruinó todos los periódicos
Famosos que ha conocido: Jenny Rivera, Lupe Esparza, Capulina
Cosas malas: Ha sufrido de asaltos, roban mucho las revistas
Lo malo: Se han visto muy afectados por el internet
Jorge Tapia, 66 años.
Tiene 40 años como voceador.
Empezó desde niño a ayudarle a su abuelo a vender periódicos.
Le encanta ser voceador por el contacto con la gente.
Le han tirado la onda muchas veces, él también lo ha hecho
Conoció a su esposa en esta profesión
La Unión de voceadores en números
Inicialmente estuvo conformada por 2 mil agremiados (mil eran hombres, 500 eran mujeres y 500 eran niños) y en la actualidad cuenta con más de 7 mil.
La Unión se integra por más de 20 mil familias
Inician a las 3 am, asumen riesgos de traslado y en su lugar de trabajo.
Tiene 7 mil 500 puntos de venta en el D.F, y Área Metropolitana. La red más grande del país.
Hay más de 5 mil 500 kioscos distribuidos en toda la ciudad
Hay 25 expendios en la Ciudad de México y surten a los 7 mil voceadores
Procesan cerca de 750 mil piezas diariamente, lo que representa un promedio de venta de 100 ejemplares por voceador.
Se distribuyen 30 periódicos y 60 publicaciones promedio diariamente.
La industria editorial genera de manera directa e indirecta alrededor de 50 mil empleos, contribuyendo a la generación del PIB de la industria editorial.
Las ventas de periódicos han caído un 70%
Origen de los voceadores
Antes eran conocidos como «papeleros», en los primeros años de su distribución en el país, a los periódicos se les llamaban papeles.
No se tiene registro de cuándo se les comenzó a llamar voceadores, pero la Real Academia de la Lengua describe que su significado es, «que vocea o da muchas voces».
La primera vez que se voceó una noticia
Vocean por las calles desde que en 1541 un impreso ofreció a los habitantes de la Nueva España la información de un terrible terremoto en Guatemala.
Primer periódico en México
Desde ese momento, los voceadores han acompañado el desarrollo de la prensa mexicana, por sus manos han pasado todas la publicaciones editadas en este país desde la fundación del primer periódico oficial en México “La gaceta de México” en 1722.
¿Voceadores remprimidos?
Entre 1823 y 1828, las autoridades prohibieron varias veces el pregón de noticias en lugares públicos, porque fueron acusados de agitadores.
Canales de distribución
Las revistas, periódicos, todos los medios impresos se distribuyen en la ciudad de México a través de:
Kioskos: Todo lo que se vende en las calles
Puestos cerrados: Todo lo que se vende adentro de un establecimiento (plazas, metros, tiendas departamentales)
Hay 5 mil puntos venta
Situación actual de los voceadores
Hace mucho que no hay voceadores.
Quedan los vendedores de los semáforos, pero “no cantan” la información.
El buen voceador, se distinguía por el modo en que agarraba el periódico.
El quiosco que no vendía antes menos de 100 periódicos diarios ahora se contenta con despachar unos diez.
Algunos voceadores dicen “Nos ha dado en la torre el Internet”. Las autoridades prefieren que el espacio de un quiosco lo ocupe un puesto de tacos. Eso da dinero, los puestos de revistas no.
