Julia Borbolla
Psicóloga. Creadora de los proyectos Antenas y Escudo de la Dignidad
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juliaborbolla.com
Cuentahabientes, honestamente ¿cuántos de ustedes dejan que sus hijos los vean llorar? O ¿cuántos se inventan eso de que traen una basurita en el ojo?
¿Por qué si nosotros como padres estamos buscando opciones para que nuestros hijos tengan un mejor desarrollo emocional, no empezamos por nosotros mismos?
Para explicarnos por qué no debemos hacernos los “fuertes” con nuestros críos, viene Julia Borbolla
Muchas veces los niños creen que sus padres nacieron adultos y eso los hace pensar que no fueron niños, que nunca fallaron y que nacieron con la seguridad y desenvolvimiento con el que los ven.
Eso desata que busquen ser como ellos, fuertes y seguros y que escondan muchos de sus temores o miedos.
La mente infantil posee una lógica insipiente, muy concreta y entonces surgen creencias infantiles:
Que sus padres nunca tienen miedo, ni culpa, ni tristeza, que nacieron como los ven ahora , con “corbata” o “bolsa”.
Que al percibir que algo pasa en casa no tengan una explicación y se pongan ansiosos pues no saber ponerle nombre a lo que sienten
Es muy importante desarrollar la inteligencia emocional de nuestros hijos y esto no se logra con discursos sino con ejemplos
Los niños pueden aprenden a expresar sus emociones al mismo tiempo que aprenden a hablar y es importante que nosotros los alfabetícenos en este sentido. “ esto qué tú sientes se llaman celos” porque piensas que a tu pequeña hermanita la voy a querer más que a ti “ Este llanto parece ser más bien coraje porque no te deje salir a jugar”
Es importante validar todas las emociones, aunque no validemos la conducta que desatan esas emociones , es decir “Entiendo que estes enojado, pero no permito que avientes los juguetes”.
Los padres tenemos que ser ejemplo de que se vale sentir tristeza o miedo y debemos verbalizarlo hablando de aquello que nos lo provocó “ayer me acorde de mi abuela y me puse melancólica.
Muchas veces tratamos de ocultar la tristeza ante la muerte de un ser querido y entonces los niños creen que no nos importó que esa persona muriera.
Algo muy importante al mostrarnos vulnerables es mostrar también maneras maduras de manejar esas emociones
Un buen ejercicio de alfabetización emocional es hacer un concurso en familia para ver quien conoce más emociones y después poner ejemplos de ellas tanto padres como hijos
Otro ejercicio importante para los padres es primero auto-analizarse y descubrir qué emociones o sentimientos nos prohibieron de niños o bien no eran bien vistos en casa de nuestros padres
Hay familias que equiparan el enojo a fortaleza y la tristeza a debilidad y eso confunde y bloquea a los hijos
En el caso de papá es fundamental dar ejemplo de sensibilidad como parte de ser hombre
No es verdad que los hombres no lloran, ellos deben ser seres humanos completos y eso implica sentir todo tipo de emociones
