Oigan, ¿cuántos de ustedes se van a la maquinita de la oficina y se echan unas galletas en el desayuno? Pues al parecer la comida chatarra está cambiando tu cerebro.
Seguro ya sospechaban esto, pero algunos estudios han revelado que la comida chatarra está cambiando tu cerebro, especialmente a la hora de aprender y entender el mundo y no podríamos estar más traumadas con esta noticia, pero, antes de que entren en pánico, les vamos a dar la solución a estos problemas.
La comida chatarra está cambiando la forma en la que pensamos
Ya sabemos que la galleta, pero la papita, pero el jugo, son una cosa espectacular, pero al parecer está cambiando la forma en la que pensamos y percibimos el mundo, de hecho Ashley Gearhardt profesora de la Universidad de Michigan, explica que, la forma en la que el azúcar llega al cerebro es similar a la forma en la que llega el alcohol, la nicotina y otras drogas adictivas. Lo peor es que no termina ahí, el azúcar tiene un fuerte efecto en el sistema de recompensa que está asociado a la motivación, el placer y el aprendizaje, entonces si nos estamos llenando de glucosa vamos a tener graves problemas, más allá de las enfermedades que ya conocemos.
Y no termina ahí, varios estudios han demostrado que hay una relación entre la comida procesada, es decir casi todo lo que encontramos en el pasillo de las botanas en el súper, y la depresión. Una investigación que salió hace unos meses en The British Medical Journal, explica que las personas que tienden a comer más cosas procesadas tienen problemas de sueño, ansiedad y riesgo de padecer depresión.
Entonces, si ya se están comiendo todo esto ultraprocesado, podrían estar dañando cañón su cerebro, pero eso no significa que no podamos hacer algo para evitar que pase y les vamos a dar unos hacks sencillos para hacerlo.
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¿Qué podemos hacer para evitarlo?
Lo mejor es bajarle al consumo de este tipo de alimentos, pero no es de un día para otro, porque el azúcar literal es una adicción y pasa lo mismo con los alimentos ultraprocesados, así que es bien importante el seguir las recomendaciones de Jessie Inchauspé, the glucose goddess, si comes los elementos de una comida que contengan almidón, fibra, azúcar, proteína y grasa en un orden específico, reduces el pico de glucosa general un 73%, y el pico de insulina un 48%.
¿Cuál es el orden correcto de comer?
La fibra primero, la proteína y la grasa después. Los almidones y los azúcares deben de ser lo último que debes de comer, si siguen este camino, el efecto es comparable a los efectos de los medicamentos para la diabetes que se recetan para disminuir los picos de glucosa.
Desayunar salado te ayudará a dominar el hambre, a hacer desaparecer los antojos, a tener un shot de energía y a agudizar la claridad mental. Ingerir grasa antes de una comida rica en hidratos de carbono disminuye la cantidad de insulina que se produce como respuesta a esa comida y acuérdense, no hay nada mejor que iniciar el día con alimentos ricos en fibra como los vegetales.
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