Rafael Santandreu
Uno de los psicólogos españoles más prestigiosos. Además de su trabajo
como psicoterapeuta, se dedica a la docencia en el Colegio de Médicos de Barcelona. Autor de los
bestsellers “El arte de no amargarse la vida” y “Las gafas de la felicidad”.
FB: Rafael Santandreu Oficial
TW:@RSantandreuOfic
rafaelsantandreu.es
¿Qué onda con la terribilitis?
La terribilitis es la madre de toda enfermedad emocional.
De hecho, todas las personas con depresión, ansiedad, con estrés, los celosos patológicos, etc. lo que tienen es terribilitis
La tendencia a calificar de ¡terrible! cosas que no lo son: si me dejase mi novia, eso sería TERRIBLE; si me quedo sin empleo… eso sería TERRIBLE… si me han dicho algo desagradable en el trabajo… eso es INTOLERABLE… que es lo mismo que ¡TERRIBLE!
De hecho, desde hace mucho años, cuando un paciente mío me pide un diagnóstico, me preguntan… ¿Rafael, yo que tengo: depresión, ansiedad, soy bipolar? Yo les digo: déjate de historias, tú lo que tienes es TERRIBILITIS”.
¿No pasa nada?
¡Los seres humanos sentimos lo que nos decimos! Como decía el filósofo Epicteto en el siglo I de nuestra era: “No nos afecta lo que nos sucede, sino lo que nos decimos acerca de lo que nos sucede”.
Pero eso sí, te lo tienes que creer; no vale con repetirse frases como un lorito.
Tienes que cambiar de filosofía a nivel radical y entonces tus emociones cambian
Yo, por ejemplo, desde hace años, tengo una filosofía anti-queja muy potente, anti-terribilización, y por eso ya no me estreso.
Los que piensan que no existen nada, nada terrible.
Existen y son las más fuertes y felices.
Hay millones de personas que no terribilizan JAMÁS, para las cuales no existe NADA terrible…
¿En qué medida esto que me sucede me impide hacer cosas valiosas por mí y por los demás?
Siempre que estés terribilizando te has de decir… “¿En qué medida esto que me sucede me impide hacer cosas valiosas por mí y por los demás?
Imagina que te deja el novio, el marido o te han despedido del trabajo… y pregúntate… “En qué medida, aún puedo hacer cosas valiosas por mí y por los demás? PUEDES HACER MILES DE COSAS por lo tanto esas adversidades son nimias.
Mientras no te mueras de hambre y de sed, déjate de tonterías, la vida es fantástica y tú puedes ser súper feliz!
Hasta lo más terrible como la muerte de un hjjo, no tienes por qué verlo así. Mucha gente ha perdido a un hijo y algunos se han deprimido y no lo han superado y otros sí… ¿tú de cuáles quieres ser?
En la época de nuestros tatar-abuelos se morían el 50% de los niños al nacer. No hace tanto. ¡A principios, de siglo!
Sigmung Freud fue rico, era médico y vivía en Viena, el centro cultural de su época… y se le murieron la mitad de los hijos. Y en aquella época todo el mundo lo superaba…
La muerte es siempre natural. Decir que la muerte de un niño es antinatural es absurdo.
Toda muerte es natural. Lo antinatural sería que no se muriese la gente
Todas las personas tenemos una vida, larga y corta, y lo importante no es vivir 1 o 100 años, sino vivir con plenitud.
Un niño que ha vivido 10 años ha vivido 10 grandes años con fuerza y plenitud.
Es importante que veamos con naturalidad todos los hechos naturales porque nosotros somos hijos de la Naturaleza y las leyes naturales aunque no las entendamos, son necesarias para el equilibro de todo.
No se trata de que todo es bueno
La filosofía cognitiva no consiste en pensar que todo es bueno.
No, en la vida tenemos adversidades pero ¡no son el fin del mundo, la guerra nuclear!
Y lo mejor es arreglar tus asuntos, pero nada es terrible.
Es decir, si no los arreglases seguramente podrías ser exactamente igual de feliz que antes… sólo que con un poco menos de dinero o sin vacaciones de verano en Nueva York.
Te has de dar cuenta que la mayor parte de las adversidades son solo “un poco malas”, pero nunca “terribles”.
La “necesititis”… ¿Qué es eso?
Antes hemos visto que el padre de la enfermedad emocional es la “terribilitis”… Pues la madre es la “necesititis”.
La creencia de que necesitamos mucho para estar bien… un buen trabajo, una novia guapa, una casa bonita, ser elegante, inteligente, tener estudio, guapo…
Y nada de eso es necesario para ser muy feliz. Sólo necesitamos la comida y la bebida del día…
Cuando no tienes necesititis tampoco tienes terribilitis: los dos conceptos van de la mano…
¿Por qué generamos “necesititis” los seres humanos?
Es un fallo de fábrica de la mente humana.
La mente tiende a convertir en necesidades imperiosas, cosas que no son necesarias. Por ejemplo, imagínate que yo me digo a mí mismo: “Me encanta esta agua de la Sierra que tomo cada día”… “Me gusta mucho, la tomo cada día”… “¡La necesito, si no tengo esta agua no puedo comer!” Vale, ya he convertido un deseo legítimo en una necesidad imperiosa. Pero cada vez que nos creamos una necesidad inventada nos hacemos débiles porque a partir de entonces, si no consigo satisfacer esa necesidad, me hago a mí mismo un desgraciado de la peor especie. Y, como veremos más tarde, si la consigo, también.
¿qué necesitamos de verdad los seres humanos?
Muy poco. Lo cierto es que lo único que necesitamos es la comida y la bebida del día.
A partir de ahí podemos ser muy felices.
Las personas más fuertes necesitan muy poco.
La salud es algo que seguro que vas a perder. A partir de los 25 años, ya empiezas a perder salud: llevas gafas, a los hombres se nos cae el pelo, a las mujeres otras cosas… Es natural: perder la salud es natural.
A todos nos pasará. Apegarse a la salud, a la larga, es estúpido.