Resúltase ser que hay una nueva tendencia en esto de las relaciones que nos llamó muchísimo la atención: parejas de fin de semana. O sea, un literal nos vemos el fin de semana y entre semana, yo hago lo mío y tú lo tuyo.
Para hablar jugoso del tema, usaremos de ejemplo a Juana, un personaje completamente inventado pero que nos ayudará a que esto se sienta más como chismecito que como nota informativa.
Empecemos: Juana porque está viviendo la vida amorosa moderna. Resulta que hace unos meses, ella empezó a salir con un chico súper lindo, divertido y trabajador (lo vamos a llamar Pablo).
Todo iba muy bien, pero había un detallito: ambos estaban tan ocupados entre semana que no podían verse. Entonces, en lugar de estresarse y forzar encuentros apresurados, decidieron ser lo que ahora se conoce como pareja de fin de semana. ¿Qué tal?.
¿Qué pasa con las parejas de fin de semana?
Por si no están familiarizadas, las only weekend couples (OWC, para los cuates) son relaciones donde los tortolitos solo se ven los fines de semana. De lunes a viernes, cada quien se enfoca en su trabajo, su gym, sus amigos, su Netflix y lo que quiera, pero llega el viernes en la noche y boom, se vuelven inseparables… al menos hasta el domingo por la tarde.
La idea suena bastante moderna, ¿no? O sea como que los abuelos chance se infartan pero nuestros amigos estén un poco-demasiado curiosos. Y es que combina lo mejor de dos mundos: mantener tu independencia mientras tienes un crush. Y Juana, que ya tuvo una relación intensa en el pasado donde casi ni respiraba sin pedir permiso, está feliz con esta dinámica. Dice que le encanta tener su espacio, y a Pablo también.
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¿Cómo funciona esto en las relaciones?
Ellos lo tienen todo planeado. Entre semana, Juana no tiene que dar explicaciones sobre por qué no contesta mensajes rápido o por qué quiere pasar tres horas viendo reels de perritos en paz. Pablo tampoco tiene que justificar por qué se queda trabajando hasta tarde o por qué necesita un miércoles para jugar con sus amigos a las retas.
Pero el fin de semana es otra cosa. Desde el viernes en la noche, Juana y Pablo se transforman en esa pareja ideal que parece salida de una comedia romántica. Cenan en lugares bonitos, ven series juntos, se hacen masajes improvisados y, básicamente, aprovechan al máximo esos dos días como si fueran vacaciones miniatura.
Juana dice que lo que más le gusta de esta dinámica es que siente que cada fin de semana con Pablo es especial. No hay rutina, no hay peleas por quién lava los platos o por quién olvidó bajar la tapa del baño. Todo es diversión y amor de viernes a domingo.
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Los pros
- Espacio personal: Juana dice que ya no se siente “invadida” como en relaciones pasadas. Puede hacer sus cosas a su ritmo y luego reencontrarse con Pablo con toda la energía renovada.
- Cero rutina aburrida: Cada encuentro es como una pequeña cita romántica. Nada de discutir sobre el súper o pelear por quién se come el último pedazo de pizza.
- Menos presión: Juana no tiene que estar 24/7 disponible para Pablo, y viceversa. Ambos tienen tiempo para ser ellos mismos y eso los hace más felices.
Pero no todo es miel sobre hojuelas
Obviamente, no todo es perfecto. Juana nos confesó que a veces siente que no conoce del todo el lado “real” de Pablo. “Es fácil ser un novio perfecto si solo nos vemos dos días a la semana”, dice. Además, cuando tuvo una semana difícil, extrañó no tenerlo cerca para un abrazo o un consejo en tiempo real.
Y luego está el tema de los domingos en la noche, cuando cada quien vuelve a su mundo. Juana lo describe como “medio raro”, porque pasa de estar en un súper mood de pareja a estar sola en su depa el lunes por la mañana.
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¿Es para todas?
Juana está feliz con esta relación, pero nos dice que no cree que este modelo funcione para todas. Por ejemplo, si eres alguien que necesita mucho contacto o que no aguanta las despedidas constantes, quizá esta dinámica no sea para ti.
Pero si estás en una etapa de tu vida en la que amas tu independencia y no quieres que nadie interfiera con tu rutina entre semana, una pareja de fin de semana podría ser ideal. Es como tener lo mejor de los dos mundos: amor y libertad.
El veredicto
¿Es la pareja de fin de semana el modelo de relación definitivo? Pues depende. Para Juana, ha sido una experiencia refrescante y hasta emocionante. “Siento que he aprendido a disfrutar más el tiempo en pareja porque no estamos todo el día juntos”, nos dice.
Así que ahí lo tienen, queridas. Tipo de relacionarnos amorosamente hay tantos como parejas en el mundo. Acá se trata de platicar, y si te llama la atención, probar para ver si es o no lo tuyo.
Es importante recordar que nada en esta vida tiene que ser para siempre y cual etapa, si quieren alargar el fin de semana, también se vale platicarlo y buscar una pareja que quiera lo mismo.
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