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2024-11-17 11:21:38

El poder del olfato

Desde por qué los olores nos recuerdan cosas, personas, lugares, por qué nos podemos enamorar de alguien, sólo por su aroma.

enero 5, 2021

Stella Maris
Otorrinolaringóloga, especialista en Alergia e Inmunopatología. Experta en Olfatologia. Expresidenta de la Asociación de Otorrinolaringología de la Ciudad de Buenos Aires.
TW: @dra_stella
IG: drastellacuevas
cvogolfato.com

El 5% del genoma humano se dedica a oler
La Universidad Rockefeller, en Nueva York, confirma que recordamos un 35% de lo que olemos y apenas un 5% de lo que vemos.
El 80% del sabor que percibimos en cada comida y bebida es gracias al olfato.
El ser humano puede distinguir hasta 10 mil olores.
El olfato es un sentido que nunca descansa, incluso dormidos olfateamos.

¿Por qué los aromas nos disparan los recuerdos?
El sentido del olfato es un sentido sumamente complejo, sofisticado y super especializado.
De hecho, el sentido del olfato nos alerta y previene ante situaciones
Está súper relacionado con el gusto, de hecho si alguien tiene alterado el sentido del olfato pueden sufrir algún tipo de intoxicación alimentaria.

La evolución del olfato
El sentido del olfato evoca recuerdos: situaciones, lugares o personas porque fue el primero en aparecer desde que hay vida en la Tierra
La nariz, en la postura que tenían los vertebrados, que era la cuádrupe, estaba muy cerca del sueño y entonces podía saber todo lo que existía alrededor y lo que pasaba justamente a través del olfato y de todo lo que entraba por la nariz.
Después, cuando adquiere una posición más erguida, aparecen otros sentidos como la vista y la audición.
Y el olfato pierde un poco de importancia.
Pero en realidad es sumamente importante, incluso en el deseo sexual porque intervienen las feromonas y eso hace que a una persona nos guste otra a través de la vista, pero la química se forma a través de los olores que sentimos de la otra persona.

¿Por qué está tan enlazado con la memoria?
Lo primero que nos ocurre cuando nacemos es respirar y oler, porque el sentido del olfato se forma aproximadamente en la cuarta semana de gestación.
Esto hace que el recién nacido, inmediatamente busque a su madre porque necesita de protección y de alimento.
Así, los olores entran por la nariz y se ponen en contacto con el epitelio olfatorio que está en la parte alta de la nariz o del tabique.
La gente cree que ahí se huele.
Pero ahí llegan las partículas olfatorias, que son captadas por el epitelio olfatorio y en especial por una célula, que es la célula olfatoria, es la ÚNICA NEURONA que está fuera del cerebro.
Por eso es tan complejo y tan delicado.

El olor y el cebro
Sí, por eso la otorrinolarigología, en especial la rinología, está tan relacionada con la neurología.
Una vez que esas partículas son captadas por la célula olfatoria principal, ese estímulo, que es químico, es captado por un nuevo receptor y se transforma en un estímulo eléctrico dentro de la célula.
Es conducido por unas ramificaciones de la parte posterior de esa célula, que forman el nervio olfatorio, un nervio muy cortito que ingresa al cerebro a través de un hueso que separa la corteza cerebral de la cara.
Inmediatamente se pone en contacto con otra estructura que se llama bulbo olfatorio.
Y ahí empieza el procesamiento de esa información.
Además, de la parte posterior de todas esas células que están en el bulbo olfatorio salen ramificaciones, que se ponen en contacto con una zona anatómica primaria. Ahí es cuando uno dice: ‘Hay olor’ o ‘Huelo algo’”.

¿Cómo olemos?
Lo que más se recuerda es el olor de los seres queridos.
La zona primaria es cuando uno dice: ‘Hay olor’.
La zona secundaria dice: ‘Hay olor a humedad o a tierra mojada’ porque los olores no tienen nombres, a diferencia de los colores.
Con los olores no tenemos educación.
Uno dice: ‘Hay olor agradable’, y eso te produce confort. O: ‘Hay olor desagradable’, y eso te produce malestar.
Cuando se decodifica esa información y dices: ‘Hay olor a tierra mojada’, inmediatamente interviene esta parte, que es el cerebro emocional, el sistema límbico.
El sistema límbico es una estructura anatómica que produce ante la presencia de ese olor cambios conductuales, que se convierten en instintos, sentimientos o en emociones.
En ese sistema límbico está el hipotálamo, que es una zona del cerebro que te indica, por ejemplo, cuando tienes sed.
Después está el hipocampo, que es el cerebro emocional, porque es la biblioteca de los recuerdos, ahí está la memoria”.

El olor y los momentos de tu vida
La tercera estructura es la amígdala cerebral, que es la que te da miedo, placer, malestar.
O sea que cuando hay un olor agradable te va a dar ese confort, ganas de permanecer en un lugar.
Pero si el olor es desagradable, te dan ganas de irte.
De hecho, si vas por la calle y basura, lo miras pero inmediatamente cierras la nariz para que esos olores no entren.

Alteración del olfato
Son muchas las enfermedades que pueden provocar alteración del olfato, como: oler menos (hiposmia) o perder por completo la capacidad de oler (anosmia).
Entre las más comunes de la disminución del olfato, están:
Rinitis.
Rinosinusitis.
Los pólipos
Traumatismos
Otras enfermedades como la diabetes, el hipotiroidismo, la obesidad o la ingesta de algunos medicamentos.

Trastornos del olfato
1. Hiposmia. Es una reducción en la capacidad para detectar olores.
2. Anosmia. Es la total incapacidad para detectar olores. En raras ocasiones, se puede nacer sin el sentido del olfato, lo que se llama anosmia congénita.
3. Parosmia. Es un cambio en la percepción normal de los olores, por ejemplo, cuando se distorsiona el olor de algo familiar, o cuando algo que normalmente te agradaba de repente se vuelve desagradable.
4. Fantosmia. Es la sensación de percibir un olor que en realidad no está presente.

Tips sobre el olfato
El olfato alerta ante situaciones de riesgo como por ejemplo pérdida de gas o presencia de humo. Si se tiene algún problema olfatorio es recomendable instalar detectores de gas y humo en el hogar.
Como el olfato se relaciona con el sabor, siempre hay que controlar las fechas de vencimiento, para evitar intoxicaciones.
Del olfato depende muchas veces el comportamiento ya que evoca recuerdos y enalgunas oportunidades, se producen cambios conductuales. Un olor puede producir emociones, impulsos, excitación o sentimientos.
Al tener una alteración olfatoria, se altera la calidad de vida.

enero 5, 2021