Todos en algún momento nos hemos pasado de drinks en un cumpleaños, en la boda del primo o en un 15 de septiembre con el pretexto de dar el grito, pero el verdadero grito lo damos al otro día por la cruda del infierno. Nos da dolor de cabeza, unas nauseas fatales y no queremos levantarnos de la cama en tooodo el santo día.
Pero, ¿qué onda con la cruda?
La cruda o resaca es la forma popular con la que se conoce a los problemas asociados con una intoxicación por la ingesta de alcohol en exceso, rebasando la capacidad de nuestro organismo para metabolizar el alcohol.
En sí, la cruda son los síntomas que tenemos el día siguiente que consumimos alcohol en exceso, y generalmente son un malestar general en el cuerpo, fatiga, dolor de cabeza, dolor muscular, ardor en el estomago, visión borrosa, diarrea, náuseas, mareo, mucha sed e inflamación en el cuerpo.
¿Pooor?
La resaca se debe a la incapacidad del cuerpo para metabolizar por medio del hígado el consumo de alcohol. Además, el alcohol provoca deshidratación, complicando más los síntomas.
El alcohol también produce una disminución de azúcar en la circulación de nuestra sangre, lo que provoca sensaciones de agotamiento físico e inhibe la vasopresina, la hormona responsable de los líquidos en el cuerpo. Los problemas en esta hormona provocan que el riñón elimine más agua de la que ingiere, provocando que las meninges (las membranas que cubren el cerebro) pierdan agua y por lo tanto, aparezca el dolor de cabeza.
Por si fuera poco, el alcohol erosiona la mucosa del estómago y provoca irritación.
Lo que dice la ciencia …
Por los problemas que provoca en el cuerpo, los especialistas de la salud recomiendan abstenerse del consumo de alcohol, por ser tóxico para éste.
Pero, dado que su consumo es en cantidades industriales (sobre todo en México), también han analizado los mil y un remedios que existen para tratar la resaca.
El Dr. David Nutt afirma que, en realidad, no se puede “curar” una resaca, pero sí se puede tratar sus síntomas.
Así, siempre bajo supervisión médica, Nutt recomienda tomar antiinflamatorios, como el ibuprofeno, antes de dormir o bien al despertar. En cualquiera de los dos casos, se debe de tomar acompañado de alimentos.
Nutt también recomienda hidratar el cuerpo tomando agua, y comer carbohidratos para “reparar” al cuerpo. En este caso, recomienda desayunar unos huevos.
También menciona que, aunque es poco probable que tengamos ganas de hacerlo, en teoría hacer ejercicio acelerará nuestro metabolismo y disminuirá la resaca.
¿Qué tenemos que hacer?
Tomar mucha agua: Todo el alcohol que bebiste ayer te ha deshidratado y ahora toca reponer esos líquidos en tu cuerpo. Bebe abundante agua, toda la que puedas y un poquito más. Poco a poco hará que te vayas sintiendo mejor. Esta es la primera clave que debes tener en cuenta para quitarte de encima la resaca.
Come lo que te pida el cuerpo: Estás hecho un trapo y tu cuerpo te pide comer chucherías: hamburguesas, pizzas, hot dogs, etc… Por un lado, la gran cantidad de azúcares y grasas de estos productos contribuirán a aumentar tus niveles de glucosa pero, cuidado, posiblemente tengas la tripa delicada.
Toma pastillas para el dolor de cabeza: De ser posible un ibuprofeno que te ayudará a aliviar el dolor de cabeza del infierno. Si no tienes, una aspirina también funciona. El paracetamol también ayuda, pero hará que tu hígado trabaje más ese día, y recuerda que ya le has estado dando bastante lata. En cualquier caso, después de tomar la pastilla con abundante líquido haz caso del siguiente consejo.
Vuelve a dormir: Ya te has tomado la pastilla, ahora deja a tu cuerpo descansar un rato más. La combinación de ese extra de sueño y la pastilla hará que te levantes mejor.
Date un baño: Gracias al vapor de agua y sus efectos refrescantes, una buena ducha te servirá para aliviar los efectos de la resaca, especialmente el dolor de cabeza. Además, también te servirá para quitarte el apeste del alcohol.
Con esto estarán del otro lado y pues ni modo cuentahabientes, lo bailado, ¿quién se los quita?
Con información de Televisa.com
elmundo.es