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2024-12-27 21:59:27

Be brave

Hay gente que tiene claro lo que quiere ser desde casi, casi palitos uno en el kinder. Yo, por ejemplo, quería ser piloto y de chiquita me la pasaba pintando aviones. Ni al caso, jajaja.

mayo 15, 2019

Pero esta revista la hicimos para los que ya están más maduritos y todavía no tienen claro cuál es su verdadera pasión. Lo único que les puedo compartir es mi experiencia. Por ahí de los 12 años jugaba con mi amiga Ana Paula a que yo presentaba los Oscares y los Grammys. De hecho, como yo amaba la música, nos pareció totalmente natural llamar a WFM para preguntar por el director, porque yo le iba a pedir trabajo. Cuando me contestaron, “WFM, buenas tardes”, colgamos y nos morimos de risa.

Pasaron los años, y como yo era creativa y bastante buena con las manos, decidí estudiar diseño gráfico, pero en tercer semestre, después de hacer palitos y bolitas, dije: “Si hago un dibujo más, me mato”. La verdad es que mi verdadera pasión era la música. Venía de una familia en la que la escuchábamos todo el santo día; mis hermanos tenían una banda musical y todo el día oían rock, y mi hermana mayor se la pasaba poniendo a los Beatles. El primer disco que yo me compré fue Give me the Night, de George Benson y después The Jacksons.

Una amiga de una amiga tenía un amigo que era dueño de una estación de radio y le pedí que me hiciera un casting. Pasé un año y medio rogándole hasta que me lo dio, y cuando me dieron el trabajo le dije a mi mamá: “Esto es lo mío, ya no quiero terminar la carrera”, y me salí de la escuela. Me imagino que mi mamá se quedó, como cualquier papá, con la preocupación de que su hija saliera al mundo real sin una carrera, pero tuvo la inteligencia y la fe para confiar en que yo estaba haciendo lo que era correcto para mí. Como siempre les he dicho, “la mejor decisión no siempre es la más popular”.

De ahí empecé a hacer lo que más me apasionaba: poner música en la radio. En realidad, tu pasión tiene que ver más con tu vocación que con lo que haces en el día a día de tu profesión. Tu vocación o propósito puede cambiar según la etapa en la que estás, pero no tu pasión. Hace años fue la música, hoy es un tema de desarrollo personal que va desde la radio hasta una revista. Mi pasión está en comunicar, compartir, alegrar y ayudar; el vehículo o la forma en la que lo haga es indistinto. Esa es una pasión. Puedes amar la música y ser contador de una disquera. O puedes ser diseñador gráfico, amar el diseño y trabajar en un despacho de arquitectos. O sea, no es la profesión en sí, sino la vocación la que realmente define lo que te apasiona ser.

El 97.7% del mundo está haciendo algo que no le gusta. La vida es muy corta y es la única que tenemos. Si ese es tu caso, terminando de leer esta revista, compra unos tenis y sal corriendo de donde quiera que estés a donde quiera que sabes que debes de estar. Porque si no eres tú, ¿quién? Y si no es ahora, ¿cuándo? Un día vamos a tener 80 años, en una mecedora, y vamos a voltear atrás para darnos cuenta si desperdiciamos o no la única vida que tuvimos.
Be brave, do your thing.

 

mayo 15, 2019