Siempre lo digo y ustedes lo saben, moi ha sido uno de los negocios más atrevidos que he hecho; en su momento fue una decisión MUY impopular. La gente me decía que estaba loca, y por supuesto que sí… y así sigo, jajaja. Hace ocho años me aventé a lanzar una revista impresa cuando todas las demás iban en la dirección opuesta, y hoy me sigo aferrando a ella cuando infinidad de títulos ya se deshicieron de esta versión. Y por eso, les quiero dar las gracias.
Les quiero agradecer todo lo que nos han inspirado a mí y a mi equipo, todo lo que nos han dejado ser para ustedes, por dejarnos acompañarlos, por demostrarnos que hay infinidad de gente que no solo quiere tener su mejor versión, sino que sale a buscarla, a trabajarla. Gracias por ser esa audiencia que escucha, que lee, que pone en práctica y que hasta corrige.
A los que llegaron hace ocho años, a los que llegaron hace cinco y a los nuevos, les reitero nuestro compromiso con ustedes de siempre darles las mejores herramientas, ponerles enfrente al especialista mejor preparado, escribirles textos accesibles, entretenidos y útiles. Es muy chistoso porque mi equipo ya sabe que siempre que me propongan un tema o me enseñen un artículo, yo les voy a preguntar: “¿y esto qué te resuelve?”. Y saben que si la respuesta es “nada, pero…”, ¡va pa’tras!
En esta edición decidimos hablar a profundidad sobre la belleza porque, como cualquier tema de desarrollo humano, esta también es una herramienta. La belleza es el resultado de muchas áreas de nuestras vidas que tienen que estar en orden, desde la alimentación, el sueño y la salud, hasta la disciplina y la autoestima.
Disfruten estas páginas como nosotros hemos disfrutado acompañarlos durante estos ocho años con 84 ediciones… y GRACIAS, GRACIAS, GRACIAS, por querer ser mejores personas TODOS los días. El mundo los necesita hoy más que nunca.