¡Qué histórico momento! El pasado 13 de abril seguramente muchos lo escucharon y, si no, aquí les dejo el podcast . Estábamos hablando con Lucy Romero de las 15 preguntas que reviven en una relación.
La numero seis decía: “¿Cuándo supiste que tu relación iba a ser algo especial?”. Yo conteste que a la semana de conocer a Spiderman, mi ahora esposo, yo ya sabía que eso iba para largo y que él, al día 16, me escribió un mail que comenzaba con: “Futura esposa”.
En Twitter, los cuentahabientes pidieron que lo llamara para que él contara su versión. Eso hicimos y medio timeline se volvió loco de amor con sus palabras, otros lloraron con la impecable declaración de amor y algunos hasta me preguntaron si Juan no tenía un hermano o un primo soltero. En cambio, yo lo regañé.
A ver, les cuento antes de que piensen que soy una perra. Juan empezó contando con todo detalle cómo nos conocimos, quién nos presentó, como nos texteábamos, cómo se enteró que me dedicaba, etcétera.
Sí, confieso que saliendo del programa lo llamé y le dije que tardó siglos en responder lo que Lucy, específicamente, había preguntado. Soy una control freak, estaba pendiente del tiempo al aire, que ya se me venía el corte encima, ¡y Juan explayándose como si estuviéramos en una cena con amigos!, pero lo importante es que Juan, cada vez que puede, me vuelve a declarar su amor.
Que no se ofenda cuando se me va el avión – que me pasa mucho-, que me acepte con todo y mis obsesiones y manías, y que sea mi mas grande fan: ¡eso es amor! Las minucias de la vida pasan en todas las relaciones, pero el verdadero amor, el amor maduro, va más allá de las estupideces cotidianas. Aunque sucedan, y aunque ya llevamos seis años juntos, nunca se me olvida lo que verdaderamente pienso de él.
Es la persona con los mejores sentimientos que he conocido, no tiene un gramo de maldad, siempre está bien (hasta cuando anda mal), genera armonía, es paciente, generoso, espléndido, paciente, entregado, comprometido, paciente y transparente, ¿ya les dije que paciente?
Jamás le diría a nadie una cosa fea, no juzga y no critica. Escucha y siempre sabe qué decir para calmarme. Sus consejos siempre son los más sensatos y confío en su corazón, su proceder y su sabiduría como nunca he confiado en nadie.
Me siento bendecida y la mujer más afortunada por haber encontrado a un hombre así para compartir mi vida.
Aunque a veces lo quiero matar (¡y él a mí!), trato de nunca olvidar que es muy fácil amarse cuando uno se ama, lo difícil es amarse cuando uno de alucina.
De poco sirve confiar en lo que uno siente, porque uno no se siente todos los días igual, y es imposible no car en el “a como me siento hoy, doy”. Love is not what you feel, love is what you do. El amor es lo que hacemos todos los días por y para nuestra pareja. El lado que no conocen de mí es el lado geisha, y es un gusto servirle en todo sentido a Juan.
Para Juan y para mí, el verdadero amor no es solamente sentimiento momentáneo de supiro, de enamoramiento y de babeo por el otro, sino una decisión absolutamente consciente, de amar al otro por todo lo que es, por todo lo que no es y por todo lo que nunca va a ser. Y así me ama Juan y así lo amo a él. Spiderman será mi más grande fan, pero sin duda, yo soy la suya.
Love is not what you feel, love is a commitment.
