El ejercicio
No importa que tan entregada al gym o entrenamiento estés, en esos días el dolor de cuerpo en músculos y articulaciones, además de la falta de ánimos te dan para bajo y solo quieres descansar encerrada en casa esperando a sentirte mejor.

El romance
Desde ver una peli abajo de una cobija o algo más sexy, tienes el “pero” y el “no” tatuado en el vocabulario. Y es que con tanto cambio de humor, ni tú misma te entiendes y terminan por pasar un mal rato los dos.

Salir
Seguro te ha pasado que esos días no quieres ver a nadie y dejas en palomita azul a tus amigas o galán con tal de no abandonar tu cuarto. No importa cuál sea el plan, siempre vas a tener un pretexto para no ir, y si logran convencerte vas con una carota de pocas amigas y nada de ganas de convivir.

Vestirte como te gusta
No es que hayas perdido el estilo o el glamour. Pero típico que en esos días amaneces sintiéndote hinchada y fea, y crees que nada te queda. Te pruebas toda tu ropa pero terminas con esos pants aguados que ya no sabes si son pijama.

Reirte
Los cambios de humor, crisis de llanto, depresión e irritabilidad son parte del síndrome premenstrual. Y con que alguien diga algo que normalmente te daría risa, en estas fechas acabas gritando, enojada o llorando.

La buena noticia es que ya existen medicamentos como Analgel Fem, que te ayudan a olvidarte de los molestos síntomas del síndrome premenstrual y a que esos días pasen como si nada, así no dejas de hacer lo que más te gusta.