Alfonso García Williams
Director y vocero principal del Colegio Merici
merici.edu.mx

Cuando llegamos, entré a una escuela de monjas de donde casi me corrieron después de 6 meses, porque mi déficit de atención estaba desatado.

Ese fue un momento muy especial, mi papá me dijo que él sabía que yo no iba a poder con un sistema educativo tradicional y encontramos un colegio en donde no sólo me permitían ser yo al 100%, también me invitaban a explorar y soltarme cada vez más. Se dedicaron a hacerme sentir que tenía un potencial increíble y a emocionarme por todo lo que podía ser.

El nombre de ese colegio, que tuvo mucho que ver para que yo sea esta Martha que todos conocen, es el Colegio Merici en la Ciudad de México. Justo el otro día pude platicar con Alfonso García Williams, el director y vocero principal del colegio, sobre la importancia de adaptar la educación a cada niño en lugar de exigirles que se adapten a un modelo tradicional.

Y se los digo yo, que nunca fui la estudiante modelo que sacaba puro diez. En el Colegio Merici tienen muy claro por qué los modelos tradicionales de enseñanza no funcionan para todos los niños. En un mundo que cambia tan rápido necesitamos preparar a los críos con experiencia que puedan aplicar al mundo real. Promover la imaginación y la creatividad los ayuda a generar soluciones y concentrarse en necesidades reales, en lugar de calificaciones.

En las muy sabias palabras de Alfonso, “tenemos que salir de la zona de confort para realmente lograr el aprendizaje”. Tenemos que enseñarle a los niños a aprender de manera autónoma y prepararlos para la vida real, donde todos los tipos de inteligencia son necesarios, más allá de medirlas por medio del coeficiente intelectual o qué tan buenos son en matemáticas o física.

El Colegio Merici tiene un modelo de educación holística, que percibe a los estudiantes como “seres orgánicos y con varias dimensiones”, personalizando y respetando la forma que cada niño tiene que aprender. Es decir, buscar diferentes caminos para que todos lleguen al mismo lado. Pone como prioridad a los niños en lugar de los programas, y necesitamos más espacios que hagan eso.

Tenemos que ser realistas y aceptar que nuestros hijos están creciendo en un mundo globalizado, en el que van a tener que competir por lugares en instituciones académicas y puestos de trabajo con personas de todo tipo y de todos lados. Necesitamos prepararlos para ser seres humanos autónomos, y eso se hace por medio de lo que Alfonso llama una “pedagogía integradora”.

En el Colegio Merici quieren prepararlos lo mejor posible y tienen un matiz internacional, creando alianzas con diferentes instituciones alrededor del mundo para darle a los niños todas las herramientas que podrían necesitar para ser ciudadanos responsables que tengan la cabeza llena de preguntas y sepan buscar las respuestas.

Para quienes quieren más información o ya están listos para cambiar a sus hijos de colegio y darles más opciones de aprendizaje, pueden entrar a www.merici.edu.mx y conocer la propuesta de este colegio para ayudarnos a criar hijos creativos, innovadores y mucho más humanos.