Les cuento que entrevisté a una experta en turismo en British Columbia y me dijo qué experiencias son imperdibles para todos los que aman conectar con la naturaleza.

Oigan ¿cuántos de ustedes aman ir a la vacación a rodearse de la naturaleza y practicar actividades al aire libre? Bueno para todos aquellos que luego me preguntan que ¿qué destino es mi mejor recomendación? Pues déjenme decirles que platiqué con Magdalena Bermea, representante de Destination British Columbia en México, para que nos platicara todo lo que tiene para nosotros, un destino como British Columbia.

Y es que Magdalena Bermea me explicaba que la Columbia Británica tiene un poco de todo lo que hay en Canadá y que aunque tiene una personalidad inglesa, también tiene una fusión increíble de cultura, que si naturaleza con montañas increíbles, gastronomía, selvas tropicales y costas maravillosas que… en fin, todo lo que se imaginen para vacacionar en cualquier momento del año, ahí lo van a encontrar.

Entonces, primero, para que se ubiquen, British Columbia está al oeste de Canadá, arriba de Seattle y para que se den una idea, esta provincia es del tamaño de Alemania y Francia juntos, pero tiene una población, como la de Los Ángeles en los Estados Unidos.

Ahora bien, en lo particular yo amo Victoria porque es un pueblito inglés, costero, divino pero, también está Vancouver o Whistler para los que aman esquiar. Y es que la verdad, Magdalena me explicó que la Columbia Británica es el destino perfecto para aquellos que buscan relajarse y reconectar con ellos mismos.

Y si no saben por dónde empezar el recorrido, les voy a decir cuáles son las experiencias que no deben perderse, si deciden visitar esta provincia canadiense:

En Vancouver está el mercado de Granville Island, para los que aman ir de shopping; pero también está el Puente Capilano que mide 140 m de largo por 70 m de alto, que se caracteriza por estar dentro de la ciudad. Además, está el Parque Stanley que es incluso más grande que Central Park, ¿se imaginan? Yo les recomiendo la primavera para visitar esta ciudad y no perderse el espectáculo de cerezos que de verdad no saben lo hermoso que es.

Por otro lado, en Victoria, que es uno de mis destinos favoritos, es imperdible tomarse una taza de té, en punto de las 5 pm; además de que pueden recorrer la ciudad caminando y visitar Butchart Gardens o los Jardines Butchart que son jardines de exhibición con más de cien años de antigüedad que ¡no bueno, se mueren! Y los jardines que exhiben cambian constantemente.

Y otro must es la Villa de Whistler que es totalmente peatonal y pueden recorrer sus dos montañas: la de Whistler y la de Blackcomb que, aunque la mejor temporada para ir es el invierno para practicar esquí, paseo en un trineo jalado por perros o caminar en raquetas de nieve; también es un destino de verano donde pueden hacer bicicleta de montaña o como yo, volar en una avioneta para aterrizar sobre el Pacífico. Y no les digo el otoño, donde los cambios de color de las hojas es un espectáculo divino. Además, deben visitar el Valle de Okanagan que tiene unos viñedos increíbles.

Y ya para cerrar, una experiencia que no pueden dejar de vivir en esta provincia es el Baño de Bosque, una terapia forestal donde además de hacer senderismo, hacen meditación entre los bosques, mientras van escuchando los sonidos y silencios de la naturaleza para reconectar con ustedes mismos.