Gaby Pérez Islas
Tanatóloga
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Escucha el podcast: ¿Por qué nos duele tanto perder?
- Todo tiene dos caras: el blanco y el negro, la luz y la oscuridad, el bien y el mal. Y aunque es más fácil engancharse con lo negativo, podemos encontrar la cara buena de todo… incluso en las más dolorosas pérdidas.
- Pérdida significa dejar de tener o nunca haber tenido lo que deseabas.
- Nadie nos enseña a perder. Por eso, Gaby Pérez Islas nos trae 10 statements para encontrar el lado amable cuando no pudimos ganar:
- Toda pérdida trae consigo ganancias pero nuestro dolor no nos deja verlo con claridad.
- Quedarte viendo una puerta cerrada no tiene sentido, en lugar de eso debes descubrir las ventanas que se abren para ti.
- Muchas pérdidas son oportunidades vestidas de negro, regalos dentro de una envoltura muy extraña. Tanto, que nos toma mucho tiempo descubrirlas.
- Perder y ganar es un binomio inseparable, pero si te quedas enojado, con los puños cerrados, no hay manera que puedas recibir lo que la vida tiene para ti.
Ejemplos de pérdidas que pueden convertirse en ganancias:
- Perder un vuelo o conexión
- Que te despidan de un trabajo
- Dejar alguna adicción (cigarro, alcohol, marihuana)
- Una mudanza, o cambio de residencia a otro país
- Una fractura
- Terminar una relación, que un novio o novia te dejen
- Que no se salve alguien que tú pedías siguiera con vida; o al revés: que no muera alguien que tú considerabas que ya debía descansar
- Algunos padecimientos o enfermedades, como un infarto, o cáncer
Escucha el podcast: Aprendiendo a confiar
- El perder debe incluir un salto de fe, porque si no el que queda perdido eres tú.
- Lo malo, igual que lo bueno, pasa. Nada es para siempre.
- La pérdida es un camino de crecimiento, no un castigo ni una lección, finalmente si algo aprendes es porque tú decidiste extraer significado de lo que pasó no porque te lo hubieran mandado para que aprendieras.
- A veces es una bendición no pedida que no se nos concedan las cosas tal y como las pedimos.
- Tener una vida espiritual puede convertirse en la columna vertebral de tu proceso, finalmente eso es la fe. Saber que las cosas pasan como tienen que pasar y no como yo quisiera que pasaran.