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Mi dolor, un trampolín de crecimiento

Aprende a procesar y transformar el dolor con 4 sencillos pasos.

enero 14, 2015

Anamar Orihuela

Terapeuta
Consulta a nuestra especialista

“Existes dos caminos hacia la evolución uno a través del dolor y otro a través de la consciencia”. Budha

– ¿Dónde está el dolor que no hemos desahogado?
– ¿Cuál es el sentido de aprender a procesar el dolor?

Preguntas de reflexión

1. ¿Te cuesta enfrentar, sentir y procesar el dolor de tu vida?
2. ¿Sientes que repites una y otra vez experiencias muy parecidas de dolor?
3. ¿Aprendiste a negar o cubrir experiencias dolorosas de tu pasado?
4. ¿Te enfermas mucho de vías respiratorias, las itis y te cuesta ser vulnerable?
5. ¿Despedir, terminar, cerrar siempre ha sido un tema difícil para ti?
6. ¿Sientes que hay muchos asuntos no resueltos en tu pasado que no has cerrado por no tocar el dolor?

Aspectos A considerar en relación al dolor.
“Dolor atrae más dolor”

– El cuerpo físico guarda la memoria de nuestro dolor pero también está en la memoria de nuestro yo emocional impactando a nuestro yo mental.
– El dolor que no hemos procesado se encuentra como una tubería sucia y llena de basura, obstruye nuestra energía creativa y no nos permite fluir con todo nuestro potencial.
– Nadie nos enseña a limpiar y permitir el fluir del dolor en nuestro yo emocional.
– Cuando algo nos duele habla de la necesidad de un cambio de ideas o patrones.

4 etapas de procesamiento del dolor

Primera etapa: Crisis

-Lo que estaba estable se mueve, lo que era seguro cambia, lo que sentías parte de se va, lo que te hacía sentir segura ya no está.
-Es el llamado a lo desconocido.
-Momento de salir de la zona de confort.

Ejemplo: Pérdida de trabajo, muerte, traición, separación, enfermedad.

Segunda etapa: La negativa al llamado

– Este es un momento de ¿Porque a mí? De Enojo o negación. Puedes fantasear, evadirte, hacer mil cosas para evitarlo.

Ejemplo: No soltar la relación, No aceptar la enfermedad, aferrarte a lo que está terminando, llenarte de actividades, negar.

Tercera etapa: La noche oscura del Alma

– Aquí nos rompemos, nos duele, lo sentimos profundamente.
– Este paso es entrar en contacto profundo con lo que sientes.
– Permitir sentir y desahogar el dolor.

Cuarta Etapa: Renacer, reintegración

– Aquí algo interior cambio.
– Es simbólicamente una iniciación a algo nuevo y una muerte a lo anterior.
– Nuevas habilidades se han despertado.
Hay comprensiones más profundas y aprendizajes.
– Es un cambio y un movimiento.

¿Cuándo se hacen heridas en el Alma?

– Todo dolor genera una herida y la cicatrización es el desahogo de esa energía acompañado de la consciencia de lo que no está bien en tu vida.
– El dolor que no encontró un procesamiento y desahogo se queda encapsulado generando una armadura y una defensa en tu vida.
– Esas defensas van moldeando tu personalidad y haciendo que tu verdadero yo se esconda y no te permite ser tú mismo.

Los 5 dolores que acorazan nuestra personalidad son:
1. Rechazo
2. Abandono
3. Humillación
4. Traición
5. Injusticia

¿Cómo procesar el viejo dolor?

1. Entender que no está en el pasado, hoy sigue en tu cuerpo y en tus reacciones fuera de control.
2. Hacerte consciente de cómo y de qué forma se manifiesta.
Ejemplo: Control, perfeccionismo, enojo, prisa.
3. Darle espacio para sentirlo, no solo comprenderlo.
4. Hacer un proceso amoroso y paciente. No podemos despojarnos del dolor en una sesión. “Yo ya lo trabajé”
5. El dolor siempre trae un aprendizaje, un regalo, un don. Al negarlo o evadirlo vuelves a generar la realidad porque la lección no fue integrada.

Aspectos a considerar

– Generamos mucho dolor innecesario para nosotros y para otros.
– Cuando aprendemos la lección el dolor desaparece.
– El dolor nos invita a morir al pasado y renacer al futuro.
– El dolor es la oportunidad de una maravillosa sanación a través de la aventura del alma.

¿Tu cómo aprendes, a través de la consciencia o a través del dolor?
La vida nos invita a hacerlo a través de la consciencia pero no nos gusta escuchar.

enero 14, 2015