Mario Guerra
Psicoterapeuta y tanatólogo
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Podemos dividir aquello que puede ser conocido de nosotros en 4 categorías:
1. Áreas brillantes: Cosas que reconoces tú e identifican en ti los demás.
2. Áreas oscuras: Cosas que ni tú ni los otros notan fácilmente de tí mismo.
3. Áreas personales: Cosas que sólo tú identificas de tí mismo.
4. Puntos ciegos: Cosas que sólo son evidentes para otros, pero no para ti.
Esto te interesa ¿Eres evita-conflictos?
No somos tan descifrables
Somos buenos juzgando nuestras creencias, actitudes y preferencias; los demás no juzgan objetivamente nuestras emociones, intenciones y pensamientos.
Solemos inflar atractivo e inteligencia
Tenemos inclinación a vernos a nosotros mismos como adecuados y competentes y no malvados e ineptos. En una persona sana, al evaluar rasgos relacionados con su autoestima, se suele tener falsas impresiones positivas (infladas). Exageramos cualidades relacionadas con la inteligencia y honestidad, atractivo físico y la claridad del lenguaje corporal.
No apuestes sobre tus percepciones
Una importante serie de estudios demostró recientemente que las evaluaciones que hace de tI tu pareja en las áreas de ansiedad, enojo, dominancia y aislamiento son mucho más precisas que las propias. También cuando te preguntan cuánto crees que tu relación romántica actual va a durar; se suele fallar por mucho. En cambio, otras personas, al ver nuestra relación, tienen porcentajes de acierto mucho mayores.
Checa esto ¿Eres adicto a la aprobación?
¿Por qué no me veo como me ven, por qué no me ven como me veo?
1. Un punto ciego que no te deja ver una parte de tu personalidad que para otros es clara.
2. Un área personal, donde sólo tú conoces lo que te motiva a actuar de tal manera.
¿Eres libro abierto o papiro egipcio?
Muchas veces la gente nos malinterpreta. Nos acusan de fríos y distantes cuando somos introvertidos o tímidos; este error es muy común por nuestros prejuicios y la poca información que damos acerca de lo que sentimos o pensamos. Randall Colvin, de la Universidad del Noreste en los E.U., ha estudiado los atributos de las personas que son más sencillas de leer. Se trata de personas que son:
- Cálidas (da más confianza observarlas)
- Extrovertidas (dicen y hacen con más notoriedad)
- Consistentes (nos dan certeza)
- Emocionalmente estables (pueden ser predecibles)
Estos rasgos se conocen como “amplificadores” y hacen que una persona sea más fácil de entender.
¿Importa cómo me perciben los demás?
En ocasiones, una conversación escuchada sin querer, un correo electrónico copiado por error o la “buena voluntad” de algún amigo que nos “informa” nos permite saber qué piensan otros de nosotros.
Nos cuesta trabajo percibirnos como lo hacen los demás porque repetidamente:
- Descartamos información tomada en cuenta por nuestros observadores.
- Tomamos en cuenta información que nuestros observadores no pueden.
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¿Importa cómo nos vean los demás?
Sí, porque el juicio social es la base para las interacciones sociales que acabarán por conformar uno de los aspectos básicos en un individuo: la vida de relación. Casi todas las decisiones que otros hacen sobre de ti, contratarte, despedirte, promoverte, ser amigos e incluso casarte están basadas en la manera en que los otros te perciben.
¿Cómo saber cómo me ven los demás?
Preguntar de manera directa y anónima a la mayor cantidad de personas, de ser posible hasta quienes consideres tus enemigos. Videograbarte en distintos contextos también te puede dar una valiosa información de tus conductas y comunicación no verbal.
