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2024-11-20 01:22:36

Divorciados y divorciadas con hijos… ¿Quién la tiene más difícil?

Quién puede rehacer su vida amorosa más fácil y más rápido.

marzo 29, 2016

Mario Guerra
Psicoterapeuta y tanatólogo
Consulta a nuestro especialista

¿Quién es la parte emocionalmente más afectada?

Contrario a lo que podría pensarse, tanto hombres como mujeres sufren la separación o ruptura de pareja. Más que cuestiones de género, suelen ser temas de circunstancia o personalidad lo que complica el estar separado.

Escucha el podcast: ¿Cómo valoran los hombres y mujeres una relación?

Los factores que más influyen son:

1. Si querías o no separarte

  • O fue más bien circunstancial por algo que ocurrió.
  • La parte que más sufre es aquella que se ve forzada a la separación, como cuando el otro le dice “ya me voy”.

2. Las circunstancias de la separación.

  • Cuando se da por desgaste de la relación, por abandono emocional o por una decisión necesaria, hay más tiempo para asimilar la ruptura.
  • Si la separación fue repentina (una infidelidad), la decisión de uno de marcharse (peor si es para irse con alguien más)

3. Las creencias en torno a la separación y al futuro.

  • Desconfianza en todo el género opuesto o las relaciones de pareja (incluso en el amor o la sinceridad de las personas). Creencia de no poder rehacer la vida. Sentirse no “querible” o rachazad@. Resignación pasiva.

Conclusión: Una persona emocionalmente herida, resentida o inestable, padecerá más los efectos de una pobre elección de nueva pareja, se verá más desesperada o acabará por arruinar la nueva relación.

Escucha el pódcast: ¿Sienten que su relación se hunde?

El problema social (el estigma)

Existen estigmas sexistas o de género en cuanto a la separación.

  • Las mujeres “solas”: Con el mito de que una mujer “sola” es “pobrecita”, muchas amigas se apresuran más que a empatizar con lo que le está pasando (con un “te entiendo”); se dedican a “echarle porras” (porque creen que las necesita), o a escarbar la herida narcisista (maldito, tú mereces algo mejor, etc.)
  • Como si las mujeres necesitaran de un hombre que las cuide o las valide socialmente.
  • Error: Una mujer que no se vea tan “sufriente” es que está en negación.
  • Los hombres “libres al fin”: Se presume que el hombre se libera del yugo del matrimonio (hasta en las bodas se le carga como a un muerto), pero la realidad es que tienden a ser emocionalmente más dependientes de una pareja y suelen tener menos fuentes de soporte emocional efectivo. (71% de hombres casados afirman que recurrirían a su esposa en caso de sentirse deprimidos y sólo 39% de mujeres harían lo mismo). Los hombres suelen buscar y dar menos soporte emocional con los amigos cuando ocurre un divorcio.
  • Error: Un hombre que se vea sufriente “necesita unos tragos y conocer a una mujer a-ho-ra”

Conclusión: Posiblemente cada uno se vea forzado a cumplir con las expectativas de género en estos casos, a menos que quiera que sus “amigos” le retiren el “soporte” emocional. Preguntar a cada uno cómo lo está llevando, escuchar, empatizar, ahorrarse el consejo simplista y aconsejar buscar ayuda profesional suele ser la mejor actitud.

El problema personal (las creencias)

En este caso quizá la parte más afectada suele ser la femenina, pues sabemos que tienden a interiorizar las culpas y eso les representa una mayor carga emocional

¿Quién me va a querer?

  • Muchas mujeres piensan que su físico, tras un embarazo, ya no puede ser el mismo y que, como el marido estuvo ahí, pues las quería con todo y los cambios, pero que un nuevo pretendiente no va a ver con ojos amorosos esos kilos de más.

Todo lo que crees que tiene que pasar antes de intentarlo

  • Cuando me estabilice emocionalmente, cuando tenga un trabajo estable, cuando gane más dinero, cuando los hijos crezcan, cuando me anime a decirle a mi familia, cuando tenga tiempo, cuando se me quite el miedo, cuando llegue “The one”.

Escucha el podcast: Hijos del divorcio: ¿cómo protegerlos?

Anularte como persona para asumir sólo el rol parental (el sacrificio)

  • Cuando creer que ocuparse de uno mismo, y no sólo de los hijos que han sido víctimas del divorcio, es egoísta, se tenderá a la abnegación con sus consecuencias.

Conclusión: La autoestima puede verse profundamente dañada tras una ruptura. Si bien hombres y mujeres sufren las rupturas, la autoestima de las mujeres puede ser más vulnerable a la interiorización de las culpas. La ayuda terapéutica favorece una visión más objetiva del presente y el futuro de la persona.

El problema práctico (las limitaciones presentes)

El trabajo/dinero

  • En general, el matrimonio provee una mayor estabilidad financiera y la separación deja en una condición complicada principalmente a quien tiene la custodia de los hijos, a quien tiene más bajos ingresos o a quien no tiene un ingreso independiente. En general son las mujeres quienes padecen más este factor (cuando no buscan venganza o revancha a través de pensiones onerosas no tanto como protección de los hijos, sino como castigo al Ex).

Los hijos en custodia

  • La custodia de los hijos es un factor limitante para hacer una vida social convencional. Las reuniones se centran en fiestas infantiles o conversaciones con otros padres. Los temas de conversación suelen ser los hijos.
  • Las salidas nocturnas, los intentos románticos y el rehacer la vida sentimental, tiene que pasar por el filtro de la responsabilidad y hasta la sensación de culpa sobre el cuidado de los hijos.

Rehacer la vida romántica

  • Con hijos de por medio y la necesidad de cubrir los gastos familiares desbalanceados, es menos probable que una mujer se vuelva a casar que un hombre (ya sea por falta de oportunidades o por ya no querer volver a pasar por lo mismo).
  • Los hombres con menor soporte social tienden a buscar casarse rápidamente anhelando que su vida vuelva a ser estable. Quizá es por eso que, para muchos, este factor les permite recuperarse más rápido de una ruptura de pareja.

Otros datos interesantes en cuestión de género:

  • Las mujeres inician el divorcio más que los hombres (2 de cada 3)
  • Los hombres tienden a ser más felices en el matrimonio que las mujeres (para ellos es más importante la estabilidad que la conexión emocional).
  • Los hombres casados tienen mejor salud que los solteros, en parte porque la mujer suele promover hábitos de alimentación más sanos y está más preocupada por la salud familiar y que ellos delegan esto en ellas, como si no fueran capaces de cuidarse a sí mismos

Escucha el podcast: Cómo hacer que las familias reconstituidas funcionen

Además tras un divorcio los hombres suelen cambiar hábitos de vida que pueden involucrar consumo de alcohol y tabaco.

  • Los hombres suelen tener peor salud mental que las mujeres tras un divorcio.

Es más probable que un hombre se suicide tras una separación.

  • Tras la separación, las mujeres tienden a mejorar sus hábitos de sueño al dormir solas y los hombres los empeoran.

Sin generalizar, ni satanizar

  • Reiterando lo que al inicio he mencionado, más que diferencias de género, hay diferencias individuales que pueden representar una ventaja o desventaja tras una separación y a la hora de buscar rehacer la vida romántica.
  • Hombres y mujeres la sufren, cada uno lo canaliza diferente, y la pregunta no es realmente qué tan rápido o fácil cada uno rehace o no su vida, sino qué tan capaz se es para buscar ser feliz a pesar de una separación y hacerse responsable de su propia vida.

Escucha el podcast: Cómo ser un buen ex esposo y ex esposa

marzo 29, 2016