David Alejando García
MD-261548
No tenía por qué estar ahí pero el destino me forzó, entonces entré al salón y la vi.
La confundí con la maestra pero era una alumna más. Hubiera sido la mejor “vista al frente” en un salón de clases. Intercambiamos correos, como todos los demás y ahí terminó el curso y así se fue el verano.
Hubo algunas palabras cruzadas durante los siguientes años que definieron una pequeña amistad, sin embargo había una vida de distancia entre las nuestras; nada nos unía, ni un camino nos llevaba al mismo lugar.
No fue hasta 4 años después de esa primera mirada (y una ida al cine), que inspirado con karaoke y whisky, la besé mientras la sostenía en mis brazos.
Ni le pregunté, ni ella se quejó y ahí todo comenzó. Hemos reído y vuelto a reír, hemos llorado, sufrido y perdonado, viajado, estudiado, bailado, emborrachado, dormido, soñado, comido, meditado, vivido y uno que otro verbo conjugado en ado-ido to so cho excepto casado, pero lo hemos hecho juntos y así es como queremos estar siempre.
Óscar Díaz
ID- 9938180
Ada y yo nos conocimos, corrección, yo conocí a Ada en la secundaria, pero ella no sabía que yo existía, y como culparla si parado frente a ella no alcanzaba a mirar por encima de su hombro.
Qué frustrante conocer al amor de tu vida antes de «dar el estirón». A pesar de lo peligroso que es entrar a la tan odiada «friend-zone» (ya que encontrar la salida es casi imposible), parecía ser la única forma de ganar tiempo mientras mis hormonas se decidían a darme la altura necesaria para verla directamente a los ojos.
No sé quien tenga el récord de pasar más tiempo solo-como-amigos, pero fue una eternidad, ya que no fue sino hasta su primer año de Universidad que por fin todas las estrellas se alinearon mientras ella se encontraba sin pareja y por fin se fijó en mí, y que mejor manera de agradecerlo que dedicándole mi vida a entera a nuestro amor.
Han pasado ya 13 años y aunque ella nunca me lo ha pedido, no quiero seguir haciéndola esperar, deseo tanto darle la boda de nuestros sueños.
Graciela Domínguez
ID-11501261
Hace 4 años me fui a vivir sola con mi labrador a una casita que rentaba la abuela de una familia.
Una vez vi salir a Javier (un nieto) de su casa, se me hizo guapo y pensé “lo voy a invitar a salir” así que me metí a Facebook y le mandé un DM “Hola soy la vecina de tu Nona, ¿te gustaría ir por un café?”, me moría de nervios.
Me contestó que sí (él vivía enfrente, pero nunca habíamos platicado). Salimos y al mes me mandó un DM “Hola soy el nieto de la Nona, ¿quieres ser mi novia?”
Para mí fue un shock pues me llegó por Face. Yo de 31 me sentía de 14, le dije que sí.
De trabajo se fue a Alemania y lo visité, allá me dijo: “Vente a vivir aquí”.
No fue nada fácil pues yo estudiaba un MBA, tenía un súper puesto, perro, familia.
Decidí apostar por la relación, para mi familia todo sonaba a la locura más grande, pero a pesar de todo me vine a Alemania. En mayo regresamos y nos queremos casar.
Humberto Zalazar
ID- 11140444
¡Te saliste con la tuya! Frase que por jodón, digo a Ana muy seguido; y es que de verdad esta niña me trae como loco.
Yo, el “incasable”, de a poco he cedido ante sus encantos y una muy inteligente forma de llegar a mi corazón, me ha llevado por un camino que jamás imaginé y me ha enamorado.
Tengo que reconocer que después de varios años de ser amigos y traerla entre ceja y ceja, ella dio el primer paso cuando un día me llamó casual y así por nada me dijo te extraño.
Nos vimos después y sin deberla ni temerla, viendo una película me miró y paró la trompita como queriendo beso. No lo pensé mucho y me animé a devolverle el gesto.
Nos hicimos novios, viajamos, vivimos juntos, me convenció para adoptar un perro y hasta le propuse matrimonio. ¡Siempre se sale con la suya!
Bueno, esto es lo que según yo, ha hecho ella… cuando la verdad, el “ganón” ¡he sido yo!
Enamorándonos diariamente con detalles que demuestran que hasta para los “incasables” como yo, realmente existen las historias de amor.
Pedro Javier Navarrete
MD- 11500332
¿Joven? No, gracias. – Respondo al vendedor del semáforo que se encuentra haciéndome señas, pero insiste y me muestra un papel, así que bajo el vidrio. –
Se lo manda el señor de adelante, me dice, así que tomo el papel.
El papel tiene escrito un nombre y un teléfono: Alberto, me río de la emoción y de la forma tan extraña de ligar; se trata del chavo al cual miré 15 minutos antes en la agencia, cuando nos entregaban nuestros carros que llevamos al servicio, pero sólo se dio cuenta de que lo observaba en el momento que arrancó su carro y miró por el retrovisor.
Al salir de la agencia yo ya tenía un rumbo fijo, pero un camión no me permitió dar vuelta a la derecha en una calle, por lo que tuve que tomar otra ruta, la cual me llevó al semáforo donde me topé con el vendedor.
Sigo sonriendo en el alto por el detalle tan peculiar y justo en el momento en que el semáforo cambia a verde, hago una llamada, llamada que sin saber me cambiaría la vida.
Raquel Serna
ID- 252383
Cuando July y yo nos conocimos yo salía de una depresión, no tenía algún porvenir ya que pasaba una crisis económica muy fuerte, élla tenía 24 y yo 23.
Yo la admiraba por ser una buena estudiante y con una personalidad increíble.
A veces me sentía extraña porque me amaba aunque no tuviese nada, me apoyo siempre de manera incondicional, estuvo presente cuando busque una beca universitaria, mientras vivíamos con un colchón en el piso, trabajábamos y estudiábamos para un futuro, no sabía si los que nos deparaba sería mejor pero su frase es «vemos cómo le haremos» y esas palabras son las que me levantan, cumpliendo pequeñas metas juntas.
Siempre quise ser la mujer a su nivel, terminé una carrera, trabajé muchísimo para remediar aquellas cosas que no hicimos de jóvenes, durante 7 años, no ha sido sólo mi novia, ha sido una mujer fenomenal que creyó en mi.
Siempre me ha dicho que su sueño es casarse conmigo y yo la amo más que ha nada, se convirtió en mi amiga, pareja y alma.
Iliana Torres
MD 194209
Para tener la boda que sueño estoy dispuesta a ventilar la historia que puso fin a mis procesos.
Mientras que para todos era evidente que el indicado estaba justo frente a mí disfrazado de “mejor amigo” por 6 años; yo en mí terquedad sólo nos veía en una gran amistad y enamorados cada uno por su lado, además me dedicaba a promocionarlo con el planeta entero como el mejor partido que alguien podía tener.
Hasta que una noche agotada de tanto andar de chancla, invoqué con todo mi ser que se ajustara el universo para unirme al hombre con el que sintiera paz y al mismo tiempo mariposas incontrolables, solté y funcionó
Por arte de magia todo comenzó a tomar forma y hace 3 años mi sonrisa esta al máximo; no tengo ni la menor duda estoy con Mr.Right! “Sometimes it is the people who no one imagines anything of, who do the things that no one can imagine” (The Imitation Game). Así que Martha, Rebe, Luz, Luisa & Elo las quiero ver bailando en mi boda.
Paulina Cortés Pérez
MD- 11497233
Nos conocimos de niños (primaria-secundaria) nos gustábamos desde entonces pero nunca nadie dio el paso.
Pero por azares del destino la vida nos unió después de 15 años pero con hijos y divorciados.
Decidimos dar ese paso que tiempo atrás no dimos y darnos una oportunidad.
Ahora formamos una familia compuesta la cual queremos unir y hacer un lazo mas fuerte con este enlace y acto de amor.
El cual hemos pospuesto por diferentes circunstancias pero que anhelamos y nuestros hijos anhelan.
Ojalá podamos lograrlo. Y seguir escribiendo nuestro destino juntos.
Cynthia R. Martínez
MD- 10604697
Estaba cansada de ser «la victima» en las relaciones, o al menos eso creía yo.
Buscaba distracción, y no volverme a enamorar NUNCA, por que según yo, sería volver a sufrir.
Lo vi, me gustó, y pensé: -aquí voy, ¡ésta aventura empieza ahora, me aprovecharé de él, y así me vengaré de todos los hombres del mundo!- creo que hasta escuché risa malévola en mi mente.
¡Santo Dios!, en ese momento no sabía lo que decía, pues ese hombre me cambiaría la vida.
Claro, empezó la aventura, pero para mi sorpresa la más linda de mi vida: detalles caballerosos, cariños y abrazos por cualquier razón.
Aún luego de un tiempo pensaba: -! Obvio ¡ !Así consiguen todo¡-.
Hoy me he tragado mis palabras, él me ha enseñado que no todos los hombres son malos, que el Amor mutuo si es posible construirlo, que querer estar con alguien para siempre.
Si es algo que se siente, que lo amo más allá de lo que le digo al irse o al terminar las llamadas, en serio, lo AMO, y es por eso que ahora no quiero dejarlo ir jamás.
Samantha Huerta Graham
11498819
“Novia de estudiante jamás será esposa de profesionista¨ Decía siempre mi abuela.
Pero cuando Juanjo y yo empezamos a andar, yo con 16 y él con 18, ni me pasó por la mente ese refrán.
Acepto que me temblaron las piernas cuando él tenía que tomar la decisión de irse y convertirse en futbolista.
Secretamente fui feliz cuando dijo que no, que lo suyo era la Economía y entonces sí me puso nerviosa el dicho aquel.
Han pasado 8 años y ahora él, si se va, pero para hacer un posgrado y yo como su esposa. Definitivamente ya no creo en los refranes.
Samantha Escandón Ornelas
MD- 11503609
Con la boca abierta dije: ¡Quiero conocerlo!
Fue hace 20 años cuando en una fiesta vi que todos estaban alrededor de un Niño que imitaba a Luis Miguel. ¡Era Jordi! ¡El flechazo fue inmediato!
Maravillosamente comenzamos a salir e iniciamos un Romance de ensueño, de escuela y manita sudada, ese primer amor INOLVIDABLE de los 17 y 19 años, pero la inmadurez nos separó.
Yo estaba rogando a Dios me mandara una pareja ideal, cuando Jordi me soñó en 2013, inexplicablemente encontró cartas que le escribí en 1994, estaba seguro que no era coincidencia si no “Diocidencia” y me buscó.
Recibí un mensaje que decía: “espero no te moleste pero no pude evitarlo, sugiero vernos y ponernos al día, quiero saber de ti, soy Jordi”. ¡Casi me desmayo al ver la firma! Nos reencontramos y nuestra alegría al vernos después de 20 años fue inmensa, supimos que jamás nos separaríamos.
El 3 de marzo cumplimos 2 años juntos y más unidos que nunca, ya que a pesar de la distancia y el tiempo, siempre nos hemos amado.
Daniela de León
MD- 10030552
14 años compartiendo la misma escuela, y fue hasta prepa que el destino nos puso en el mismo salón.
A pesar de que Fer siempre me molestaba en las clases, nuestra amistad iba creciendo.
Fue en una fiesta en la que se dio cuenta de lo que sentía por mi y su perseverancia y detalles fueron lo que me conquistaron.
Justo cuando el amor iba creciendo me dio la inesperada noticia que se iba becado a estudiar a EU por 4 años, aún así decidimos seguir.
Llamadas de horas y verlo a través de la computadora era lo que alegraba mi día.
Cuando se graduó y pensé que por fin estaríamos juntos decidió quedarse a la maestría.
Además de lidiar con la distancia tuvimos que aguantar todos los comentarios de nuestros familiares y amigos, el típico “amor de lejos, felices los 4” y “Amor de lejos, es de pen…sarse”
Hoy después de 10 años, podemos decir que la distancia no fue obstáculo para nuestro amor.
Y cuando lo escuché decirme que quería despertar a mi lado todos los días, confirmé que el destino tenía razón.