Con Eduardo Calixto
Neurofisiólogo
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En neurociencias se investiga sobre traumatismos, estrés, depresión pero difícilmente se realizan investigaciones con respecto a los mecanismos neurobiológicos de la alegría, la felicidad u otros sentimientos agradables.
– La alegría se enumera entre las emociones primarias o básicas del hombre, la felicidad constituye una mezcla de sentimientos positivos.
– Si bien la sensación de felicidad se acompaña de sentimientos agradables, la felicidad también puede aflorar en medio del dolor.
La felicidad tiene elementos subjetivos sobre los cuales se basan dos premisas importantes:
1. Cada individuo tiene elementos y estrategias diferentes para sentirse feliz.
2. La felicidad es un proceso corto en el cerebro.
Las emociones positivas nos mantienen anímicamente estables y nos ayudan a prevenir trastornos de la personalidad. Cuando nos esforzamos para alcanzar una meta, el éxito obtenido puede asociarse con la sensación de felicidad. Esto es un proceso de evolución del cerebro humano: trata de superar lo ya conseguido y se promueve estrategias para continuar su desarrollo. Estos eventos acercan al cerebro a generar impulsos emocionales positivos que son premiados socialmente.
Por ejemplo, las neuronas en espejo se activan cuando observamos las características de una persona feliz, encontramos por regla general y de manera inconsciente más atractiva a una persona feliz y sonriente que a una enojada o malhumorada. Estas circunstancias fomentan las relaciones amistosas y los contactos dentro de grupos sociales. Las personas felices son receptivas a los sentimientos, aparecen sensaciones de aproximación y unidad con el entorno social.
Las neurociencias indican claramente que la felicidad personal está basada más en las relaciones sociales que con el dinero.
La alegría y los sentimientos positivos influyen directamente en la salud, aumenta la producción de anticuerpos, específicamente la inmunoglobulina G así como la producción y activación de los linfocitos T. Disminuye la liberación de cortisol y se incrementa la liberación de endorfinas, disminuye la secreción de ácido clorhídrico en el estómago cambia la activación de las glándulas su sudoríparas en la piel, se incrementa la calidad hídrica de las lágrimas y se favorece un proceso de relajación muscular corporal. A nivel cardiovascular es posible identificar una disminución de la presión arterial sistólica asociada a una relajación de la contractilidad cardiaca.
Neuroquímica de la felicidad
El neurotransmisor involucrado en la interconexión fisiológica de estas áreas es la dopamina, la cual es una sustancia química pequeña con una vida media de escasos 5 a 8 segundos la cual modula los procesos hedónicos y placenteros. Este sistema de recompensa es el que reconocen las drogas de mayor adicción (cocaína), alcohol y estupefacientes. Es la hormona de los sentimientos de solidaridad, altruistas y compañerismo.
Nuestra felicidad tiene un sustrato:
– Genético 50%
– Toma de decisiones y experiencias 40%
– Circunstancias 10%
Checa los artículos por especialista:
– Salud y felicidad, David Duarte
– Neurobiología de la felicidad, Eduardo Calixto
– ¿El dinero hace la felicidad?