Mario Guerra
Terapeuta y tanatólgo
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Si bien es cierto que al inicio de una relación la atracción física y sexual juega un papel fundamental, diferentes cambios y circunstancias alteran esta atracción y ocurre un gradual y notorio distanciamiento entre las parejas.
¿Qué tan frecuente es?
• 43% de las mujeres y el 31% de los hombres presentan problemas de baja libido o pobre desempeño sexual.
¿Cuando eso pasa es que mi pareja ya no me quiere, no le atraigo, o lo está haciendo con alguien más?
• No necesariamente. Eso depende mucho de las causas:
1. A veces se quiere y no se puede
• Disfunción sexual.
• Por ejemplo con la Menopausia/Andropausia.
• Efecto secundario de algún medicamento.
• Suele ser de inicio repentino.
• Causas circunstanciales como estrés social o laboral.
2. Ni se quiere, ni se puede
• Disfunción sexual y disminución de la libido.
• Menopausia/Andropausia.
• Medicamentos.
• Depresión, ansiedad o algún otro trastorno psiquiátrico.
• Experiencias sexuales negativas en el pasado.
3. A veces se puede y no se quiere
• Falta de atractivo hacia la pareja por diversas causas como descuido corporal o monotonía en el sexo.
• Enamoramiento hacia otra persona.
• Recordemos que la Dra. Helen Fisher nos habla de 3 sistemas de enamoramiento:
1. Atracción sexual
2. Amor romántico
3. Apego de largo plazo.
4. Se quiere, se puede, pero se decide no
• Hijos durmiendo en la misma habitación.
• Como cuando hay resentimiento en la pareja y se le castiga o condiciona la relación sexual.
5. Amor sin sexo, sexo sin amor
• Existe un fenómeno psicológico conocido como el…
“Complejo de la Virgen-Prostituta”
(término acuñado por Sigmund Freud en 1925)
¿Qué es?
• Imposibilidad que tiene un hombre de mantener relaciones sexuales cuando está en una relación comprometida con una pareja estable.
• Esto generalmente sucede con una esposa, pero cualquier otra mujer (otra esposa, concubina, etc.) que adopte ese rol, provocará el mismo efecto.
¿Qué lo causa?
•Generalmente la figura materna en la infancia.
•Descuido, abandono, abuso verbal, emocional o físico; rechazo o distanciamiento.
• El infante reprime muchas de los recuerdos asociados a esta conducta de la madre.
• Para lidiar con el miedo al rechazo, al abandono y el enojo que siente hacia su madre, el niño se aleja de situaciones que lo pongan en “riesgo” de intimidad emocional” y que puedan reactivar esos recuerdos.
• Miedo al incesto.
• Rechazo, miedo a la intimidad y miedo al abandono.
• Aún así, la necesidad de conexión emocional no desaparece e
• Inconscientemente el niño busca con quien conectarse.
• Cuando llega la edad de buscar una pareja romántica (generalmente la adolescencia) ese joven buscara a alguien que le recuerde de alguna forma a su madre.
• Pero como en la infancia también se desarrolló una “prohibición” o Tabú hacia el incesto, cuando encuentra esta pareja la empieza a ver como su madre y entonces no tendrá relaciones sexuales con ella.
¿Cómo se manifiesta?
• Quien lo padece divide a las mujeres en dos categorías:
• Mujeres a las que amar y admirar – Que les asigna el rol de “Vírgenes inmaculadas”.
• La pareja estable y/o con la que se ha comprometido, a la que se le “beatifica”.
• No deben verlas ni sexuadas, ni “agresivas”
• Mujeres sexualmente atractivas – Mujeres que les asigna el rol de “Prostitutas” que deben ser devaluadas.
• Por el enojo que inconscientemente guardan hacia la parte “mala” de su madre.
• Aquí entran todas las demás mujeres (excepto esposa, madre, hijas y/o hermanas).
• Infidelidades recurrentes.
• Una vez que establecen a su pareja estable como la madre, salen en búsqueda de quien creen que pueda ser una “prostituta” que pare ellos es toda mujer que acepte tener relaciones sexuales con ellos.
• Del lado femenino, esta también puede darse por las necesidades no satisfechas.
• Canalización de la energía sexual hacia otras actividades.
• Pornografía.
• Encuentros casuales sexuales.
• Adicción al sexo.
• Ciber sexo o sexo virtual
¿Nunca hay sexo?
• Al inicio de la relación sí, pero quizá sólo las veces suficientes para procrear una familia.
Pero antes no era así
• Más bien no se había manifestado. Suele dispararse con eventos simbólicos.
• Al momento del matrimonio.
• Al vivir juntos.
• Al embarazo.
• Cuando nace un hijo (ahora ya no es mujer, sino “una madre) .
• Hoy hay amor, pero no atracción sexual.
Consecuencias en la relación
• Deterioro en la calidad de la relación.
• La mujer se siente impotente para despertar el interés sexual de su pareja.
• Resentimiento e insatisfacción.
• Sensación de abandono y confusión.
• Ruptura o divorcio.
Es común, pero no es tan fácil de diagnosticar. Para saber qué pasa, aquí siempre es bueno comparar
• A veces el desempeño sexual de nuestra pareja se hace notorio cuando lo comparamos con otras personas derivado de
• Experiencias propias con parejas del pasado.
• Experiencias que otras personas nos han compartido de su propia vida sexual y que para ellos son muy “normales”.
• Esto es útil cuando entras a una nueva relación y has tenido varias desde donde poder comparar ahora.
• Si sólo has tenido una, tampoco te dice mucho poder comparar la actual sólo contra esa.
• Si la relación no es una nueva, lo mejor es comparar el desempeño actual contra el desempeño pasado.
• Cómo ha sido la persona antes y cómo está siendo ahora.
¿Qué hacer?
• Buscar identificar si algo de lo que hemos dicho puede ser el problema.
• Si el problema es general, un médico puede ser de ayuda.
• Andrólogo, ginecólogo, internista.
• Si se da sólo con la pareja formal y esto ha sido recurrente.
• Psicoterapeuta, sexólogo o terapeuta de pareja.
• La monotonía y rutinas son un enemigo en este caso.
• Busquen hablar más de ustedes y menos de los niños y problemas domésticos.
• Utilicen la creatividad y la imaginación en su vida sexual.
• Lo mismo que se busca afuera hacerlo adentro.
• Fotos explícitas de cada uno entre Ustedes, caricias, lenguaje explícito entre ustedes.
• Empiecen a verse como la pareja que son y no sólo en su rol de padres, amigos o compañeros.