Escucha el podcast: ¿Por quién diluyes tu vida?
Responde cada cuestionamiento del 1 al 5, donde:
1 = nunca, 2 = casi nunca, 3 = a veces, 4 = casi siempre y 5 = siempre
- Cuando alguien se pasa de la raya mejor no dices nada con tal de llevar la fiesta en paz.
- Sueles decir que sí, cuando muchas veces te habría gustado decir que no.
- Haces cosas de las que luego te lamentas con tal de que otros no piensen mal de ti o se enojen contigo.
- Sueles tener problemas con tu tiempo o tu dinero porque lo repartes entre otros.
- Cada fin de semana comes algo que te hace daño o no te gusta porque a los demás les encanta.
- Vas a un restaurante, el servicio es pésimo, el mesero te trata mal y aún así le dejas propina.
- Eres en el que siempre se recargan los demás para pedirle favores, consejo o contarle sus penas porque te ven como el fuerte.
- En tu casa o recámara siempre hay música o un programa de TV, serie, película o evento deportivo que ni te gusta.
- Cuando vas a comprar algo como ropa, un aparato o un auto, acabas comprando algo que no te gustaba o pagando por seguros extras que no querías comprar.
- Piensa en alguien que quieres mucho. Tienes tus tarjetas de crédito hasta el tope, le debes hasta al de la basura y aún así vas a comprar un regalo para esa persona en alguna festividad.
Resultados:
50 a 41: Vives para otros. Casi tendrías que revisar periódicamente tu acta de nacimiento y tu imágen en el espejo para recordar quién eres.
Tienes problemas serios y además aunque digas que sí, feliz no eres.
Los demás pueden pensar que eres “bien buena gente” y otros lo piensan en otras palabras.
40 a 31: Eres complaciente. Seguro muchas personas te buscan para pedirte cosas, pero casi nunca para invitarte nada o ayudarte.
Como le has hecho creer que tú necesitas nada y que siempre estás disponible, pues se lo han tomado muy en serio.
30 a 21: Riesgo de resbalar. Muy bien; a veces dices que no o buscas balance en tu vida, pero es muy fácil pasarse del otro lado sin darse cuenta y empezar a ser complaciente.
Mientras tengas consciente con quién y para qué haces lo que haces, estarás bien. Si empiezas a acercarte mucho a la orilla de las complacencias, es probable que te vayas al despeñadero.
20 a 10: Normalito. A veces por una relación tenemos que hacer cosas que no nos gustan, pero eso en ti no es la norma y lo haces más bien como excepción.