Dr. Enrique Tamés
Decano de la Escuela de Humanidades y Educación Tecnológico de Monterrey
TW:@enriquetames
De las distintas mediciones de felicidad que hay en el mundo, Gallup World Poll de manera consistente muestra que las mujeres son en general más felices que los hombres en los más de 70 países donde se aplican las encuestas.
En 20 de estos países son claramente más felices: Japón, Filipinas, Argentina, Vietnam, India, Estados Unidos, Senegal, Turquía.
Aun y cuando en el mundo, inclusive en los países desarrollados existe el “gender gap”, las diferencias de sexo:
Más bajos ingresos
Menos acceso a educación, menos escolaridad.
Menos acceso al sistema de salud (y a pesar de ello viven más).
Se han hecho estudios, y no parece haber correlación entre felicidad de género y las diferencias antes mencionadas. No importa el “gender gap”, las mujeres en general son más felices, y existen varias teorías al respecto:
Las mujeres piensan su felicidad no con respecto a los hombres, sino con respecto a ellas mismas en el pasado. Hoy son más felices que antes.
Sus ámbitos de realización son de mayor bienestar y felicidad que las de los hombres: la familia, las relaciones sociales, las amistades vs trabajo, política, economía…
Las mujeres tienen mayor resiliencia que los hombres.
Si no es la cultura, puede ser la biología (nature, not nuture).
Ahora bien, siendo que en la mayoría de los países hay poca diferencia o las mujeres en general son más felices, hay unos cuántos países donde las mujeres son menos felices que los hombres, y uno de esos países es México. (Junto con algunos países de Europa oriental: Ucrania, República Checa)
El INEGI desde hace años mide lo que se llama el Bienestar Subjetivo, que es una medición que hacen muchos países en el mundo, países europeos, Estados Unidos. El bienestar subjetivo mide principalmente 2 cosas:
Satisfacción de vida. ¿Qué tan satisfecho estás con tu vida?
Que no es lo mismo que si te preguntan si eres feliz. La satisfacción tiene que ver más con una línea de tiempo.
Mexicanos: 8.04
Mexicanas: 7.88
¿a qué se debe?
No hacen lo que quisieran hacer de sus vidas.
El efecto “el pasto del jardín de enfrente es más verde”.
Cuando la familia no funciona, falta de más soporte social.
El balance afectivo. Una suma de emociones positivas (gusto, amor, alegría, buen humor, placer) y una resta de emociones negativas (disgusto, mal humor, tristeza, duelo).
Se trata de tener un balance de suma positiva, la mayor cantidad de emociones positivas, y la menor de negativas, admitiendo que las negativas tienen un papel importante en la vida.
Mexicanos: 5.82
Mexicanas: 5.35
¿A qué se debe?
Más sacrificios que placeres.
Rol social de abnegación (vivir la vida de los otros: hijos, pareja).
Las emociones negativas tienden a ser más largas, y/o las positivas más cortas.
Con el tema de la igualdad de género tan presente en el México de hoy en día, no debe pasar desapercibido el tema del bienestar y la felicidad en las mujeres. Hay que seguir midiendo y estudiando para entender y combatir lo que seguramente tiene raíces culturales profundas, que hasta estereotipos de han hecho de la mujer “sufrida y abnegada”. En tema más en la agenda si queremos que el país transite mejor en este siglo, que sin mujeres felices, es imposible.
