Jacobo Dayán es experto en Derecho Humanos, historia mundial contemporánea, genocidios y relaciones internacionales. Actualmente es conductor del programa Así las cosas que se transmite por W Radio. Síguelo en@dayan_jacobo
No sé si alivia o preocupa pero la sensación que tenemos millones de personas es compartida en las altas esferas de Naciones Unidas
"> Por Jacobo Dayán
Tw. @dayan_jacobo
Al parecer algo se desmorona, hay más violencia que en los últimos años, el discurso de odio toma cada vez más espacios, crece la amnesia de los horrores del pasado, la inacción internacional preocupa, los medios solo reproducen, falta compromiso en todas las esferas.
El discurso del Alto comisionado de Naciones Unidas para los Derechos Humanos, el jordano Zeid Ra’ad Al Hussein, durante la apertura de la sesión del Consejo de Derechos Humanos fue contundente: la intensificación de las violaciones a Derechos Humanos en todo el mundo lo tiene “enfadado y agotado” y tan solo lleva un año en el cargo.
Después de hacer un recuento de la situación en más de 30 países aceptó que el sistema de Naciones Unidas es insuficiente para afrontar la crisis y pidió que los países pasen del discurso a los hechos, la situación actual es de vergüenza. Destacó que la violencia y la injusticia no cesan, que la pobreza es abrumadora y que hay un preocupante aumento de odio, fanatismo y racismo.
Así mismo, Al Hussein pidió a los países apertura para poder colaborar en mejorar las condiciones de millones de personas y condenó la falta de aceptación al escrutinio y la crítica. Queda claro que no solo en México las y los ciudadanos no somos el foco principal del gobierno y que lo que preocupa a las autoridades es su imagen. La soberanía de los Estados deja de tener sentido si no se ofrecen condiciones de seguridad, libertades y derechos a las personas.
Otros de los graves problemas es la falta de verdad e impunidad con la que se desenvuelven varios gobiernos, el nuestro incluido. Esto alimenta un ciclo de violencia, inestabilidad, ingobernabilidad y desesperación.
Como si estuviera haciendo una crítica al sistema mexicano, Al Hussein afirmó que la corrupción y los conflictos de interés están desmoronando al estado de derecho y a la legitimidad de los gobiernos. El respeto por los derechos humanos es pilar central de sociedades pacíficas y prósperas, para lograrlo se requiere de sociedad civil organizada, ciudadanos participativos y medios de comunicación libres y plurales, en todo lo anterior México tiene un fuerte déficit.
Sobre México el Alto Comisionado comentó: “Hace un año, 43 estudiantes desaparecieron en México, probablemente fueron asesinados por bandas criminales conectadas a funcionarios corruptos. Doy la bienvenida a la decisión del Gobierno de México para solicitar la ayuda de la Comisión Interamericana, a través del Grupo interdisciplinario de expertos. Su informe ha proporcionado a las autoridades recomendaciones importantes que confío serán seguidas de manera integral con el fin de reorientar la investigación, escudriñar la responsabilidad de las autoridades en todos los niveles, y establecer la verdad.” ¿Será así?
A partir del discurso de Al Hussein podemos ver que, sin ser consuelo, los problemas en muchas partes del mundo son concurrentes, que hemos centrado el foco en los síntomas y no en la enfermedad, que la inacción es intolerable y criminal, que el modelo internacional se encuentra rebasado, que el horror de años que pensábamos pasados se esboza por la ventana.
Jacobo Dayán es experto en Derecho Humanos, historia mundial contemporánea, genocidios y relaciones internacionales. Actualmente es conductor del programa Así las cosas que se transmite por W Radio. Síguelo en@dayan_jacobo