Típico: tu primera clase del día es a las 7 de la mañana o tienes junta en la oficina a primera hora, y anoche te quedaste despierta hasta muy tarde viendo tu serie favorita, estudiando, terminando un proyecto o checando tu interminable timeline en Twitter o Facebook (aceptémoslo, es imposible ponerse al día cuando por cada 20 tweets o posts leídos aparecen otros 50). Parece que siempre hay un motivo para desvelarse, pero recuerda que es súper importante descansar el total de horas que tu cuerpo requiere para rendir al máximo y sentirte de buen humor al día siguiente.
Checa estos tips para que comiences el día con energía y una actitud positiva.
• Despierta con música: Prepara una playlist con las canciones que te provoquen ganas de bailar y te ayuden a levantarte de la cama con una sonrisa.
• Actívate con ejercicio: Una carrera de 20 minutos o un poco de yoga (los típicos cinco Saludos al Sol), es más que suficiente para que tu cuerpo arranque de la mejor manera.
• Salta a la regadera: Una ducha, especialmente si te ejercitaste antes, es una forma rápida y efectiva de prepararte para el resto del día sintiéndote limpia y consentida. Incluso si llevas prisa, tómate algunos minutos para humectar tu piel antes de salir de la regadera.
• Desayuna adecuadamente: Tu cuerpo necesita esa gasolina después de varias horas sin consumir alimentos. Preparar algo rápido y nutritivo no requiere tanto tiempo, algunas opciones son un plato con rodajas de manzana, queso cheddar y nueces; leche baja en grasa con cereal alto en fibra; o rebanadas de pan integral untadas con queso crema.
• El último consejo: Prepárate para la mañana siguiente desde hoy. ¡Planea y organiza tu día para que la noche siguiente sí puedas ir a dormir temprano!
Con información de St. Ives
