Más de 300,000 compañías, entre ellas Procter & Gamble, Amazon y Google; han adoptado una política de permitir que sus empleados lleven a sus mascotas, no sólo un día al año, sino diario.
En Estados Unidos es muy habitual la política pet-friendly, casi un millón y medio de estadounidenses acuden cada día al trabajo con su mascota. Cientos de oficinas, tiendas, talleres… y hasta el mismo Congreso aceptan a esos ayudantes caninos (y algunos felinos). Hoy por hoy se estima que más de 2.3 millones de personas en todo el mundo acuden a trabajar acompañados de su fiel compañero.
Y si tanta gente se apunta a este movimiento, alguna ventaja tendrá ¿verdad? Y aquí enlistamos cada una de ellas:
Menos ansiedad
Llevar al perro a la oficina reduce el nivel de ansiedad y pulsaciones, además te aleja del estrés de la jornada laboral, Universidad de Virginia Commonwealth, en EE.UU.
El estudio, publicado en la revista científica International Journal of Workplace Health Management, revela que los trabajadores de empresas que permiten el acceso de los perros muestran un nivel de satisfacción mayor que quienes no tienen a sus mascotas cerca. Es decir, trabajan más cómodos y seguros.
Mayor felicidad
Acariciar a tu mascota reduce el ritmo cardiaco y es fácil que te haga sonreís, gozar de la compañía de un can ayuda a la relajación, Barker College
Los efectos positivos del perro sobre el estado de ánimo funcionan, incluso, cuando el perro no es propio. Quienes gozan de la compañía de sus canes en la oficina están más contentos y trabajan más felices.
Compañerismo se hace presente
Una oficina con perros es un sitio más amigable y que, por lo tanto, mejora las relaciones humanas. El perro te ayuda a estar más tranquilo y eso mejora la calidad del contacto entre personas, Asociación Americana de Productos para el Perro
No te preocuparás por dejarlo solo
Hay una ventaja práctica, y es que no te preocuparás por tu amigo fiel, pues lo tendrás cerca y estarás al pendiente y te hará sentir mejor.
Si ya te animaste a llevar a tu mascota al trabajo pero no hay lugar suficiente, ¡ni te preocupes!, la plataforma digital Pet Sitter International propone algunas soluciones fáciles y sencillas:
• Diseñar zonas libres de animales, para evitar que algunos trabajadores puedan ofenderse o sentirse molestos.
• Cuidar con esmero la higiene del can presente en la oficina.
• Asegurarse de que el perro disfrutará de su estancia en la empresa. No todos los canes aguantan pasar tantas horas tranquilos.
• Si el perro es un animal nervioso, conviene permitirle tener contacto con los compañeros de trabajo poco a poco.
• Llevar juguetes a la oficina, en especial, huesos caninos y otros objetos que el perro pueda roer durante horas.
¿Qué opinas de trabajar en la oficina junto a tu mascota? ¿Tienes alguna experiencia? Compártela con nosotros en Facebook o Twitter ¡amamos leerlos!
Con información de Discovery Home & Healt