Mario Guerra
Tanatólogo, terapeuta
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-¿Cuál es tu postura?
-Imagina por un momento que tu pareja de pronto tiene gran éxito o alcanza un logro muy importante.
-Puede ser desde un ascenso, un reconocimiento público o alcanzar una meta personal relevante.
-¿Cómo te hace sentir eso con relación a ti mismo o a ti misma?
¿Qué suele pasar?
-El modelo de mantenimiento de la autoevaluación propuesto por Tesser (1988) se basa en la suposición de que todos necesitamos sentirnos bien con nosotros mismos y tener autoevaluaciones positivas.
-Esta necesidad afecta la manera en que interpretamos los hechos y nos relacionamos con la gente.
-Si una persona muy querida tiene éxito en algo relevante para nosotros, nuestra autoevaluación positiva se verá amenazada.
-Tendemos a compensar esa sensación de tres maneras:
1.Quitar relevancia al logro
– “Fue chiripada”, “Le han de haber ayudado”, “No estaba tan complicado”.
2.Pensar que nosotros lo hubiésemos hecho mejor (desempeño relativo) o pronosticar su fracaso.
– “Yo porque no he querido meterme en eso…”; “Pues sí lo hizo, pero se llevó mucho tiempo, yo lo hubiera hecho más rápido y hasta mejor…”; “Esas son niñerías, yo no me ocupo de esas cosas…”; “Pues a ver si aguanta la presión…”; “A mi se ma hace que no le dura el gusto…”
3.Alejarnos del otro
– Sentir resentimiento y alejarnos física o emocionalmente de esa persona.
-Mientras más cercana y querida es la persona, y mientras más relevante es para mí su éxito, mayor será la influencia que tenga sobre mi autoevaluación el hecho.
-Influirá más que mi hermana obtenga un ascenso en el trabajo a que un desconocido reciba un reconocimiento nacional.
¿Qué dice la ciencia acerca de esto en las parejas?
Un estudio publicado en el Journal of Personality and Social Psychology en agosto de este 2013, y que fue realizado por la Dra. Kate A. Ratliff (U. de Florida) y el Dr. Shigehiro Oishi (U. de Virginia), y avalado por la American Psychological Association (APA) realizó varios experimentos:
– Tomó 32 parejas universitarias. Les aplicó a cada uno (hombre y mujer) un test de resolución de problemas e inteligencia. Luego, hizo creer a cada uno que su pareja había quedado entre el 12% de los resultados más altos o el 12% de los resultados más bajos.
-Cuando les preguntaron conscientemente a todos como se sentían cuando su pareja había salido más alto, todos dijeron que eso no les afectaba.
-Entonces aplicaron un test para medir la autoestima inconsciente.
-Cuando los hombres creyeron que sus parejas mujeres habían quedado entre los mejores, su autoestima inconsciente disminuyó notablemente en comparación con aquellos que pensaban que su pareja había salido más baja que ellos.
-Cuando aplicaron el mismo test a las mujeres, encontraron que su autoestima inconsciente no se vió alterada por los resultados de su pareja.
En otro experimento, se entrevistaron a 657 participantes (284 hombres) y los evaluaron acerca de su sentir con relación al éxito de su pareja en dos tipos de áreas:
-Actividades que la pareja había realizado, en las que hubiera tenido éxito o fracaso, y que al entrevistado no le interesara o nunca hubiera intentado hacer.
-Actividades que la pareja había realizado, en las que hubiera tenido éxito o fracaso, y que el entrevistado estuviera interesado en desarrollar o que en algún momento lo intentó y había resultado exitoso o fracasado.
Los resultados indicaron que:
-Las mujeres no habían sido alteradas en su autoestima inconsciente en ninguno de los dos caso, aún cuando su pareja hombre hubiera tenido éxito y ellas no.
-Los hombres había experimentado una disminución muy importante en su autoestima inconsciente cuando su pareja había tenido éxito en algo en lo que ya habían fracasado, pero también sufrieron baja de autoestima cuando sus parejas habían tenido en éxito en algo que a ellos ni siquiera les importaba o nunca habían intentado antes.
En suma, los hombres tienden a interpretar el éxito de sus parejas como un fracaso suyo, independientemente si existe o no competencia en las áreas donde se tuvo el éxito.
¿Por qué pasa esto?
1.Errores en el enfoque:
-En vez de pensar “Mi pareja es exitosa”, inconscientemente se piensa “Mi pareja es más exitosa que yo”.
2.Género
-Los hombres tienden a ser más competitivos que las http://www.apa.org/news/press/releases/2013/08/men-self-esteem.aspxmujeres.
3.Estereotipos de género
-Residuos tradicionalistas colocan al hombre como aquel que sostiene el poder y a la mujer como la que está destinada a complacer.
-Definición de la masculinidad a través de los logros y el éxito en una postura dicotómica de “O tienes éxito o eres un fracasado”. “Lo importante no es competir, sino ganar”, “Nadie se acuerda de los segundos lugares”.
4.Presión social
-La presión social donde se empuja a los varones a “probar su valor” a través de la competencia y el logro.
-Las mujeres también buscan el logro, por supuesto, pero ellas además también están interesadas en además mantener la armonía en una relación.
Para investigar en el futuro
Los autores del estudio abren la puerta a una nueva interrogante:
-“¿En qué medida los hombres se pueden sentir menos optimistas en el futuro de una relación luego del éxito de su pareja mujer, al grado de pensar que ellos mismos puedan terminar con esta relación o que su pareja pueda hacerlo en el futuro?”
¿Qué hacer?
-Revisar nuestra definición de éxito personal.
-Observar en qué está sustentada la autoestima personal. Creencias, aprendizajes y actitudes. Desafiar o al menos cuestionar lo que hemos aprendido.
-Mirar a la relación de pareja como un sistema de colaboración, mutualidad y conexión, más que como un campo de batalla o una cancha de futbol.
-Redefinir el concepto que se tiene de masculinidad hacia modelos más útiles y realistas, donde sabemos que, neurológicamente, la empatía y la cooperación están preestablecidas tanto en hombres como en mujeres.
-Hacer del miedo al fracaso un aliado para perseverar y en la pareja encontrar apoyo desde un esquema de “el éxito de uno es el éxito de ambos”
Para saber más: