Eugenia Debayle
Editora del portal de belleza thebeautyeffect
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-Como alguna vez lo dijo la actriz francesa Catherine Deneuve: “Llega un momento en la vida en la que debes de escoger entre tu trasero o tu cara”.
-Y es que aparentemente no se pueden tener las dos cosas a la vez, ya que mucho de lo que haces para tener un cuerpo monumental tiene consecuencias en la piel, especialmente en la cara. Increíble ¿no?
-Parece que estamos ante una paradoja: subir de peso para que la cara se te vea joven o bajar de peso sacrificando tu piel.
-En un artículo de la revista Women´s Health la Dra. Leslie Buaman, dermatóloga cosmética en Miami Beach señala: “Lo primero que se ve afectado son las bolsas debajo de los ojos, después arriba de la sonrisa, el mentón y las mejillas, pues el ejercicio en exceso debilita el colágeno y la elastina provocando flacidez.
Así que si eres de esas que se siente mal por no hacer tres horas de ejercicio, ¡alégrate estás haciendo algo bien!
El nuevo cuerpo
-No podemos negar que muchas mujeres a sus 40 años tienen mejor figura que cuando tenían 20, pero esa jovialidad no siempre se refleja en su cara, es decir no hay coherencia entre una y otra.
-La Dra. Doris Day, profesora de dermatología del New Yorl Langone Medical Center y coautora de Forget Facelift afirma: “Quienes están en sus veintes deben de mantener un 15% de grasa, aunque no es el caso de las que tienen cara más rellena porque tienen la fortuna de no sufrir las consecuencias tan dramáticamente.
-Por su parte, las mujeres con cara delgada y angular necesitan mantener 25% de grasa en su cuerpo, sobre todo si están en los cuarentas.
El sudor y tu piel
-Ben y Howard Kaminsky, químicos y autores del libro “Beyond Botox: 7 strategies for sexy, ageless skin”, afirman que sudar es necesario y una manera de eliminar toxinas, pero hacerlo en exceso, (hiperhidrosis) durante el ejercicio intenso muchas veces trae como resultado una piel irritada e inflamada y hasta acné crónico.
-La razón: “sudar de manera excesiva lleva a que gran cantidad de sudor se quedé en la superficie de la piel, llevando a la rojez, inflamación y picazón”.
¿Qué hacer?
La respuesta no es dejar el ejercicio sino hacer ejercicio de manera inteligente.
1. Ejercicio
-Sabemos que para tener una vida sana el ejercicio ya no es opcional. Conocemos sus beneficios en los músculos, huesos, flexibilidad, en nuestro corazón y el control de peso.
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