Cada 8 de marzo es el Día Internacional de las Mujeres, y por eso les vamos a dar el testimonio de 5 mujeres de 4 países sobre cómo están los derechos de las mujeres en otras partes del mundo.
Desde Rusia hasta Japón, esto es lo que está pasando con los derechos de las mujeres, con esto podemos entender qué onda con lo que pasa en México y tener una comparativa de lo bueno y de lo malo.
¿Cómo están los derechos de las mujeres en otros países?
A nivel mundial, las mujeres representan solo alrededor del 25% de los parlamentarios en todo el mundo. Aunque ha habido avances, la representación política de las mujeres sigue siendo baja en muchos países.
Según la UNESCO, más de 130 millones de niñas en todo el mundo no asisten a la escuela. Aunque la brecha de género en la educación se ha reducido en muchos países, aún persisten disparidades en el acceso y la calidad de la educación para las niñas y las mujeres. Y la ONU dice que 1 de cada 3 mujeres en el mundo ha experimentado violencia física o sexual en algún momento de su vida.
A nivel mundial, las mujeres ganan en promedio alrededor de un 20% menos que los hombres. Además, las mujeres tienen menos probabilidades de tener empleo remunerado que los hombres.
¿Qué está pasando en Rusia con las mujeres?
Sabemos que Rusia es un país bastante marcial y con reglas estrictas para la sociedad, especialmente las mujeres y la comunidad LGBTQ+. Un dato interesante es que la población actual de Rusia es de más de 146 millones de personas, de las cuales el 57.7% son mujeres y son las que están más reprimidas.
Tan es así que se informa que 36,000 mujeres son golpeadas de manera diaria por sus esposos o parejas, y que tres cuartos de las mujeres rusas sufren de algún tipo de violencia doméstica.
Otro estudio de investigación reveló que un promedio de 79% de las mujeres casadas que participaron eran víctimas de violencia psicológica, 50% de las mujeres casadas estaban sometidas a violencia física, y 23% de las mujeres casadas eran víctimas de violencia sexual.
En la extinta Unión Soviética las mujeres tenían los mismos salarios, o incluso mejores, que los hombres, pero ellos no se veían obligados a asumir la mínima carga en casa o con los niños, de tal forma las mujeres trabajaban y al salir tenían que hacer todas las tareas del hogar y cuidar de los hijos.
Adicionalmente, las mujeres tienen prohibido el realizar trabajos que se consideran netamente «masculinos» como:
- Soldadora
- Calderera
- Cerrajera (en industrias pesadas y alcantarillado)
- Pavimentadora de asfalto
- Techadora
- Maquinista de bulldozer, graduador, excavadora,
- Carpintera
- Herrera
- Electricista (en trabajos de alto voltaje)
- Leñadora
- Carnicera
- Maquinista de trenes largos o metro.
- Conductora de autobús
- Contramaestre
- Capitán del barco
- Técnico de aviación
- Bombera
- Buzo
- Minera
- Trabajos de agricultura con el uso que químicos y pesticidas
- Operadora de grúa
Y para colmo, en Moscú se instauró la ‘Ley de la bofetada’ en la cual se establece si un golpe no necesita hospitalización no es delito.
Palestina, en el ojo del huracán
Después de meses de un conflicto bastante desigual, las mujeres en la Franja de Gaza, están padeciendo los horrores de la guerra, por ejemplo la escasa higiene femenina, la falta de comida, agua, la muerte de sus hijos, esposos, padres y madres, además de la precariedad sanitaria que existe en la zona en donde las mujeres con enfermedades como el cáncer no pueden acudir a hospitales al no haber o por ser un territorio controlado por los Israelís.
A pesar de que el estado de Palestina tenía una población de más de 5 millones de personas, de las cuales el 50.12% eran mujeres, se enfrentan a una situación compleja, marcada por la ocupación, el conflicto y el patriarcado. Viven bajo una doble opresión: por ser mujeres y por ser palestinas.
Las palestinas sufren el peso de una sociedad patriarcal, y el peso de las religiones: por un lado el de la cristiana, porque un 10% de Palestina es cristiana, y también el de la musulmana y de las versiones extremas del Islam que están aumentando su influencia en los últimos tiempos.
También sufren la opresión de la más absoluta precariedad. Y por supuesto la opresión que conlleva el bloqueo y la ocupación israelí. Por eso se dice siempre que la emancipación total de la mujer en Palestina es inseparable de la emancipación del pueblo palestino.
Las mujeres en Palestina son apenas una quinta parte del mercado laboral y ocupan los peores trabajos. Está muy arraigada la idea de que su lugar está en casa cuidando a los hijos. Los hombres, por su parte, trabajan y lideran la lucha por la independencia. En 2020, el Centro de Asesoramiento Jurídico y Orientación para la Mujer ( ONG palestina) registró 19 mujeres asesinadas por sus parejas en Cisjordania y 18 en Gaza.
India tiene una relación extraña con las mujeres
Una de las mayores potencias del mundo y que se perfila a ser líder en lo que resta del siglo XXI, está marcada por la desigualdad social y hacia las mujeres quienes son consideradas como moneda de cambio y muchas veces son casadas a la fuerza para tener al menos un futuro decente.
Pero una vez casada, la esposa depende totalmente de la voluntad de su esposo y de la familia de éste y si tiene la mala suerte de convertirse en viuda, entrará a un grupo social marginado y pobre, excluido de manera física, emocional, cultural y religiosa.
En el tema escolar, están mejor que la mayoría de los países de oriente próximo, ya que alrededor de 12 millones de mujeres están matriculadas en cursos universitarios en India. Sin embargo, a pesar de que los datos demuestran una tendencia a la reducción de la desigualdad, tan solo el 60% de las mujeres saben leer y escribir, frente al 81% de los hombres y la disparidad económica es del casi 60 por cierto, es decir por cada 100 dólares que gana un hombre, una mujer gana 30.
Uno de los éxitos es que en el 2001, se prohibió en el país el matrimonio infantil con una ley que fija en 18 años para las mujeres y 21 para el hombre la edad mínima para contraer matrimonio. Pero Unicef advierte de que esta práctica sigue existiendo, sobre todo en el entorno rural, donde se producen un 56% de los casos.
Japón trata de ser mejor con las mujeres
Aunque es uno de los países más importantes del mundo, con un avance tecnológico y económico impresionante, mantiene aún largas tradiciones en donde las mujeres son vistas como delicadas y que no pueden hacer trabajos normalmente asociados con los hombres como por ejemplo ser CEOs de empresas, de hecho sólo el 8% de todas las empresas niponas están lideradas por una mujer.
Y si hablamos de líderes en el parlamento japonés apenas hay un 10% de mujeres, solo hay dos ministras entre la veintena de miembros del gobierno y únicamente un 1% de los alcaldes son mujeres.
Otro ejemplo claro sobre la disparidad es que cuando se tiene hijos en Japón, son las mujeres las que dejan el trabajo para cuidarlos: Japón tiene uno de los permisos de paternidad más generosos del mundo: 52 semanas con 60% del sueldo aproximadamente.
Pero no existe la custodia compartida, por lo que suelen ser siempre las madres quienes acaban con la custodia completa de las criaturas, pasando muchas dificultades para mantenerlos. Según la OCDE, en Japón las mujeres dedican de media tres horas y tres cuartos a trabajos no remunerados (tareas de la casa, compras, etc) y los hombres 41 minutos exactamente. Es el país con más diferencias entre sexos de toda la OCDE.
También pueden leer:
- Avances y retrocesos de los derechos de las mujeres en el 2024
- Mujeres que cambiaron la ciencia
- ¿Por qué repites patrones de crianza con tus hijos?
- Libros que les cambiarán la vida
Fuentes
Natalia Tiniakova Robotova de 53 años de Rusia. FB: Natalia Tiniakova // IG: @nataliatinia
Lama Naser Abushaban, tiene 21 años de Palestina, Franja de Gaza. FB: Lama Abushaban //
IG: @lama_naser__
Shino Watabe. 54 años. Japón. FB: @Shino Watabe // IG: @ shino_watabe
Rashmi Devjani. 45 años. India. No tiene redes sociales.
Neelam Kumari. 39 años. India, Nueva Delhi. FB y IG: @Nikki Chauhan