La Reina Isabel II es una de las soberanas más longevas y ha demostrado que una mujer tiene mucho más temple y liderazgo.
La Reina Isabel II demostró ser una mujer poderosa, pero más allá de eso su legado es y será de vital importancia para entender la historia del siglo XX y XXI.
DATOS INTERESANTES SOBRE LA REINA ISABEL II
A su 21 años Isabel aseguró que dedicaría toda su vida al servicio de la gran familia imperial.
El reinado de Isabel II coincidió con la desaparición del Imperio británico, cuya joya era India y se independizó en 1947 (cinco años antes de ascender al trono).
La reina tiene poderes sobre el Gobierno de Australia, Las Bahamas, Barbados, Belize, Jamaica, Nueva Zelanda, Papúa Nueva Guinea y todos aquellos países que pertenecen a la Commonwealth (una colonia formada por un grupo de países que se gobiernan por sí mismos pero profesan respeto hacia esta figura y al Imperio británico).
La Reina Isabel II vive en el Palacio de Buckingham, una edificación de 77 mil metros cuadrados, constituidos por 775 habitaciones en su interior, y en el que próximamente se realizarán obras de reconstrucción valoradas por unos 237 millones de dólares.
A pesar de que todos los poderes en Reino Unido es ejercido por el Primer Ministro y el Parlamento “en nombre de Su Majestad”, es inconstitucional que la monarca vote, sin embargo, todos los documentos oficiales y leyes necesitan su firma.
La reina es considerada la suprema autoridad británica, por lo que en Reino Unido los delincuentes no son condenados por sus crímenes, si no por haber interrumpido con sus acciones la paz de la soberana.
Isabel II es la única reina con derecho a ordenar que se imprima una biblia.
Es la única persona en el mundo que dispone de un cajero electrónico en su casa. No necesita licencia de conducir ni pasaporte, debido a que estos documentos se emiten a su nombre.
Su fortuna personal aproximada, heredada en gran medida de su familia, alcanza unos US$ 425 millones, según un análisis del Bloomberg Billionaires Index. Representa 3% de la riqueza del británico más rico, Gerald Grosvenor, duque de Westminster. La mujer más rica de Europa, Liliane Bettencourt, tiene una fortuna de US$ 32.000 millones.
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