Polo de Velasco
Médico Cirujano por la UNAM, dos años de Medicina Interna en Centro Médico
Nacional La Raza, Dermatología en Hospital Gea González. Actualmente asesor dermatológico En Hospital de la Luz y dedicado a la práctica privada en Dermatología De Velasco.
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Aplicar demasiados productos. La gran mayoría de los dermatólogos estamos de acuerdo que los pacientes que tienen una piel sana no necesitan una rutina facial demasiado compleja, pueden cambiar los tipos de dermolimpiador, las texturas del fotoprotector, diferentes presentaciones de hidratantes pero en general 4-6 productos son suficientes para mantener la piel en condiciones óptimas:
Dermolimpiador (usarlo mañana y noche)
Antioxidante (por ejemplo vitamina C)
Fotoprotector (mínimo FPS 30)
Hidratante (sueros para pieles grasas o mixtas, cremas para pieles más secas)
Dormir sin desmaquillarte ni limpiar tu cara: Al limpiar correctamente tu piel vas a retirar el sebo, suciedad, maquillaje y TODO lo que se ha acumulado en su superficie y también vas a favorecer que los productos que apliques puedan absorberse mejor para darte el beneficio que estás buscando al usarlos.
Olvidarte del cuello, escote y las manos: estas dos primeras áreas son particularmente sensibles ya que la piel es algo más delgada y con menor densidad de glándulas sebáceas por lo que es INDISPENSABLE incluirlas en la aplicación de tus productos del cuidado facial (emolientes, antioxidantes, etc) y tienen en común junto con el dorso de las manos que la mayor parte del tiempo nunca están cubiertas por ropa, por lo que es MUY importante aplicar también fotoprotector en cantidad y regularidad apropiados para evitar el envejecimiento prematuro.
Exfoliar en exceso: la fricción intensa y/o demasiado frecuente puede disminuir la capacidad de restauración del manto lipídico que es la primera capa de protección de nuestra piel y la responsable de mantener la humedad dérmica así que la estaríamos haciendo más propensa a sequedad excesiva o incluso mayor producción de sebo por compensación en áreas como frente y nariz. Además, en caso que en nuestra rutina de cuidados faciales esté incluido alguna sustancia potencialmente irritante como alfa hidroxi ácidos o retinoides podemos causar intolerancia a estos.
No usar fotoprotector o no aplicarlo correctamente: ya sabemos que lo hemos repetido en muchas ocasiones pero queremos que lo hagas perfecto ya que es la intervención más importante que puedes hacer para retrasar al máximo el envejecimiento de tu piel. Las reglas del uso correcto del fotoprotector son:
Úsalo diario sin importar si no sales de casa o está nublado.
Mínimo FPS 30 y con protección UVA, ideal pantalla mineral y si es posible que proteja contra luz azul también
Aplica al menos dos veces al día, en la mañana y a mediodía; si puedes cada 4 h mientras haya luz solar.
Fumar: ¿sabías fumar causa manchas y arrugas? Cuando fumas suceden 2 cosas: primero una fuerte vasoconstricción que disminuye el flujo de sangre a tu piel y al folículo del pelo retardando el recambio celular y acortando la fase de crecimiento capilar, lo segundo es un incremento muy importante en la formación de radicales libres que causan daños estructurales favoreciendo la aparición de manchas, disminuyendo la síntesis de colágeno y elastina también.
Usar todo el tiempo esmalte de uñas y gelish: Debes de saber que aplicar este tipo de productos favorece el adelgazamiento de la uña, la formación de líneas longitudinales y cambios de coloración. Es ideal que dejes descansar después de cada aplicación de esmalte al menos 7-10 días y después de gelish al menos 2 semanas, de este modo permites que se recupere el aparato ungueal y evitas problemas a la salud de tus uñas.
La dieta…lamentablemente los carbohidratos simples no solo causan el acúmulo de adiposidad, se ha demostrado que los productos finales de la glicacion se adhieren a las fibras de colágeno tornándolas rígidas y frágiles; parece que este efecto puede aminorarse con ciertos productos dermatológicos pero lo mejor es evitar los excesos en nuestra alimentación.
No cambiar las fundas de las almohadas con frecuencia: la piel de tu cara y tu pelo están en contacto con la funda de tu almohada al menos 7 horas cada noche durante las cuales tu piel continúa el proceso de descamación y la producción de sebo mismos que se depositan en la tela con la que están en contacto, ¡imagina lo que se puede acumular en tan sólo una semana! Por eso te recomendamos que cambies por funda limpia una vez a la semana por lo menos y si ya estás muy comprometida con tu pelo y rostro te sugiero que cambies a fundas de seda que son más gentiles con tu piel para evitar la formación de las arrugas prematuras por la presión al dormir.
Esperar demasiado a visitar al dermatólogo: llevas algunas semanas con un brote de acné, una mancha que ha empeorado su coloración en los últimos meses, un lunar que se ve raro o una “bolita” que ha empezado a sangrar…no pospongas programar tu consulta, la gran mayoría de los problemas de tu piel tienen una gran posibilidad de mejorar incluso de curarse si buscas atención por parte del especialista, si aparentemente todo está bien, una visita al año para revisión de lunares y ajuste de tus cuidados de la piel será una gran inversión.
